La abogada Doris Benegas es una de las impulsoras de la querella que hoy se interpondrá contra la delegada del Gobierno español en Madrid, Cristina Cifuentes, el jefe superior de la Policía en Madrid, Alfonso Fernández Díaz, y el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, por las actuaciones de los agentes entre el 11 y el 19 de junio, cuando se produjo la abdicación de Juan Carlos de Borbón y su sustitución en la jefatura del Estado por su hijo Felipe.
«No se respetó el derecho de manifestación y otros derechos cívicos como la expresión, la libertad ideológica, no ser detenido ilegalmente...», ha indicado Benegas, que ha recordado que durante el acto de proclamación, en el que Madrid se blindó policialmente, «todo tipo de expresión republicanda resultó prohibida».
El día 11, según ha rememorado, «se impidió una concentración republicana», que había sido convocada por la coordinadora 25S. «Ya desde los aledaños se impidió acercarse. Aquellos que llegaron fueron dispersados con violencia mientras que otros fueron apartados bajo la explicación de que estaba prohibida porque eran órdenes», ha explicado la letrada.
El 19, cuando se certificó el recambio monárquico, la persecución contra quienes protestaban contra la institución fue también notable. Como prueba van a presentar diversos vídeos y fotografías que muestran a policías españoles agrediendo o retirando a personas ataviadas con los colores de la bandera republicana, vetados durante aquella jornada. Tal y como relató este medio, los agentes alejaron del recorrido de la Gran Vía a las personas que, supuestamente, iban a protestar contra la monarquía. Algunos fueron alejados a la plaza Vázquez de Mella, en Chueca, fuera del cordón policial y a varios metros del trayecto realizado por Felipe de Borbón. Otros sufrieron golpes y empujones que han sido reflejados en la querella a través de partes de lesiones.
«Hubo una prohibición de la expresión y manifestación por razones ideológicas y políticas», ha denunciado Benegas, quien tiene parte de lesiones después de que varios agentes le retorciesen el brazo antes de mantenerle retenida durante media hora sin razón aparente. No es la única.
Son tres los firmantes de la querella que sufrieron daños físicos durante una jornada en la que la presión policial fue asfixiante y se centró en que no se pudiese exhibir nada que mostrase el descontento con el Borbón. «Se puso en marcha todo un Estado de excepción», ha lamentado Benegas, que ha recordado casos como el de una mujer a la que no se le permitió andar por Gran Vía por llevar una chapa con la bandera tricolor republicana.
La querella será presentada hoy a las 11.30 horas en los juzgados de plaza Castilla. Por otro lado, la coordinadora 25-S ha convocado una acción para este sábado a las 19.00 en Madrid bajo el lema «Monarquía no es democracia».