La patronal CEOE-Cepyme y los sindicatos CCOO y UGT se encuentran en plenas negociaciones en Madrid para cerrar un pacto salarial para el periodo 2015-2017 en el marco de la renovación del Acuerdo Interconfederal para el Empleo y la Negociación Colectiva.

En este contexto, en Euskal Herria, el sindicato LAB mostró su preocupación porque la subida de salarios puede que «no sea suficiente para recuperar el poder adquisitivo perdido» y apostó por unas «referencias y decisiones propias». Asimismo, exigió a las instituciones vascas, «y sobre todo al Gobierno de Lakua», que «apuesten, de una vez, por mejorar las condiciones de los trabajadores, suban los salarios en el sector público e interpelen a la patronal para que haga lo mismo en el ámbito privado», porque «impulsar una Mesa de Diálogo Social para que esto no cambie es un torpedo para las soluciones».

Ainhoa Etxaide, secretaria general de LAB, y Garbiñe Aranburu, secretaria de Negociación Colectiva y Acción Sindical, aseguraron ayer en una rueda de prensa que «ha llegado el momento de subir y dignificar los salarios, siempre con incrementos superiores al IPC (Índice de Precios al Consumo)».

Etxaide y Aranburu advirtieron que su sindicato «no aceptará recortes salariales realizados bajo el pretexto del IPC negativo». En este sentido, matizaron que «ya desde el crecimiento económico mostramos nuestras dudas sobre la referencia del IPC porque creíamos que no repartía de manera correcta los beneficios. Esa es la única referencia que hay en este momento, y lo que no se puede hacer es eliminar esa referencia con el objetivo de bajar los sueldos. Estamos en contra de esa situación».

Asimismo, señalaron que «es mentira eso que tantas veces ha dicho la patronal de que van a mantener los salarios. No es verdad, se están recortando». Y como ejemplo, ambas representantes de LAB dieron a conocer que en algunas empresas ya se ha dado el caso de proponer bajadas de salarios debido al IPC negativo de 2014. Por ello, recalcaron que se trata de «una pelea que hay que hacerla empresa por empresa porque la situación de cada una es diferente». Sin embargo, hicieron un llamamiento a los trabajadores para que «denuncien esta situación a los sindicatos». En el caso de LAB, además, no descarta recurrir incluso a los tribunales al entender que «no existe ninguna base jurídica sobre la que se sustente esta medida».

«Demasiadas vías fáciles»

En opinión de Etxaide, la bajada de salarios -«ajuste que se está produciendo principalmente desde el año 2010»- la hemos sufrido de manera personal, pero también de manera colectiva. Creemos que se han utilizado demasiadas vías fáciles para bajar los salarios: el desempleo, ya que han despedido a gente; han convertido los contratos de jornada completa en contratos de jornada de tiempo parcial; han congelado todos los salarios mientras la vida se ha ido encareciendo; y han ampliado la jornada laboral con el mismo o incluso menos sueldo».

Todo ello, según Ainhoa Etxaide, ha dejado consecuencias en la sociedad, ya que «ha creado pobreza y precariedad» y «cada vez hay menos dinero en manos de los ciudadanos. La razón principal de todo ello es el salario, la fuente más importante de riqueza. Detrás de todo eso no está la crisis, sino injustas decisiones políticas. Están jugando con los salarios para ampliar sus beneficios».

Junto con toda esta valoración, el sindicato LAB publicó un documento en el que recalca que los salarios y el blindaje ante la reforma laboral serán el eje de sus prioridades en la negociación de los convenios.