El Comité Central de la OLP, en su XXVII conferencia, celebrada en Ramallah, ha analizado la situación política, «a la luz de las violaciones israelíes y crímenes contra el pueblo palestino, así como la inactividad de actores significativos de la comunidad internacional», señala la nota.

Y en línea con el debate en el seno de la OLP, la organización «ha decidido suspender todas las formas de coordinación en seguridad con Israel debido a las sistemáticas vulneraciones de sus obligaciones de los acuerdos firmados».

Por otra parte, este organismo de la OLP, integrado por 124 miembros elegidos del Consejo Nacional Palestino (CNP), ha resuelto mantener intactas las instituciones de la Autoridad Palestina (ANP), creada en 1994 tras la firma, el año anterior, de los acuerdos de paz de Oslo rubricados con Israel.

«La ANP fue el resultado de la lucha nacional del pueblo palestino para pasar de la ocupación a la independencia. Sus instituciones deben mantenerse y no deben ser disueltas», indica la resolución, que pone fin a especulaciones que apuntaban a su posible disolución.

Otra de las medidas aprobadas en el congreso, celebrado en la Mukata, la sede presidencial palestina en la ciudad cisjordana de Ramallah, ha sido la de boicotear todos los productos israelíes y no solo aquellos que proceden de los asentamientos ilegales.

Figuran asimismo, el rechazo a todo intento de que Israel sea reconocido como Estado judío, «así como la islamización de la región adoptada por entidades extremistas», señala la nota.

En el plano interno, la OLP aboga por reforzar la reconciliación nacional palestina en línea con los acuerdos relevantes, medida que «facilitará la reconstrucción de Gaza, que sufre del bloqueo ilegal y prolongado de Israel», que define como «potencia ocupante».

Otra resolución recoge la celebración «lo antes posible» de elecciones presidenciales y parlamentarias, incluidas del Consejo Nacional Palestino.

Asimismo, se incide en el apoyo a las iniciativas diplomáticas palestinas, incluidas la adhesión a tratados y organizaciones internacionales, con el objeto de insistir en que la comunidad internacional haga responsable a Israel de «las violaciones sistemáticas del derecho internacional».

En esta línea, reitera el apoyo al Alto Comité Nacional para la Corte Penal Internacional (CPI), organismo en el que Palestina tiene previsto convertirse en miembro de pleno derecho el 1 de abril.

La OLP no renuncia al mismo tiempo a formular en el marco de la Liga Árabe un nuevo proyecto de resolución ante el Consejo de Seguridad de la ONU que ponga una fecha límite a la ocupación de los territorios que Israel capturó en la Guerra de los Seis Días de 1967, después de que fracasara un intento en esa línea el pasado diciembre.