Falta un mes para las elecciones municipales y cinco para las plebiscitarias del 27 de setiembre, y las entidades soberanistas lo han aprovechado para empezar a calentar el ambiente y relanzar el proceso independentista. Lo han hecho desbordando el Palau Sant Jordi y sus 16.000 asientos en un acto titulado «Tornen les urnes, tornem al carrer». El objetivo perseguido es doble: reactivar la movilización independentista de cara al 27S y fijar las municipales del 24 de mayo como primera vuelta de las plebiscitarias.

Y de paso, forzar una unidad de acción de los partidos soberanistas que, tras la tensión de los últimos días, las formaciones han tratado de dar por finiquitadas hoy con una foto de familia antes de comenzar el acto. En la foto, Josep Rull (CDC), Oriol Junqueras (ERC) y David Fernández (CUP).

El acto ha ha tenido especial relevancia para Carme Forcadell, que esta tarde ha ofrecido su último discurso como presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC). Forcadell ha querido subrayar la importancia de las elecciones municipales como la cita para demostrar que «cuando votamos, los catalanes votamos mayoritariamente independencia». «El 24 de mayo iniciaremos el estado catalán», ha añadido.

«Estamos preparados para desobedecer las leyes injustas españolas», ha asegurado también Forcadell, quien ha considerado que la desconexión respecto al Estado español es ya irreversible: «Ningún estado ni gobierno podrá evitar que votemos el 27 de setiembre». «Estaremos al lado del Parlament, del Govern y del president para hacer que el 27S sean las elecciones más extraordinarias de nuestra historia, las que convertirán a Catalunya en el próximo estado de Europa», ha concluido.

Llamado a la unidad

Antes de Forcadell ha tomado la palabra la presidenta de Òmnium Cultural, Muriel Casals, quien se ha referido veladamente a las tiranteces de los últimos días entre CDC y ERC para recordar que la fórmula que les ha permitido llegar hasta el día de hoy es la combinación de «unidad urnas e independencia. «Ahora los necesitamos en grado superlativo», ha apuntado.