Joseba ITURRIA.

LA ESPECIAL EMOCIÓN PARA LOS VASCOS DEL CAJA RURAL DE ESTAR ANTE SUS VECINOS

Jonathan Lastra, Alex Aranburu y Jon Irisarri son los tres jóvenes vascos del Caja Rural que han vivido las dos últimas etapas con una emoción especial. Sobre todo el ciclista bilbaino, que pudo entrar en la escapada camino de su ciudad y subió al podio como líder de las metas volantes.

El Caja Rural-Seguros RGA da la oportunidad de participar en la Itzulia a tres jóvenes vascos que derrochan ilusión por correr ante su público con los World Tour con muchos menos medios. «Desde este autobús a ese que está al lado hay kilómetros de diferencia –destaca su director Eugenio Goikoetxea–. Para un equipo como el nuestro la diferencia cada día es mayor. Hay algunos corredores que uno solo vale más que toda la estructura nuestra. Es lo que hay. Solo nos queda pelear por coger las fugas y a ver si algün día hay algún resquicio de los equipos del World Tour y lo podemos aprovechar».

Goikoetxea añade que «hasta ahora no nos podemos quejar, hemos cogido todos los días las escapadas y hemos sido protagonista en la parte final de la etapa de Donostia con Rosón. Tenemos el maillot de las metas volantes, subimos al podio todos los días y al final si lo ganamos será un premio al esfuerzo de todos, todos los días. Trofimov era el corredor que fichamos para estar adelante junto a Pardilla y Rosón y por problemas burocráticos de papeleo no podemos contar con él. Pero estamos completando la plantilla, hemos venido con un equipo joven e ilusionante y no hay que pensar en lo que nos falta sino en el que tenemos».

Jonathan Lastra subió ayer al podio en el que calificó como su mejor momento como profesional: «Correr en casa da una motivación extra. He tenido un sentimiento brutal tanto pasando El Vivero como en Begoña. El objetivo era coger la fuga, porque siempre tiene que haber uno del equipo delante. La intención es que fuera yo, pero es complicado. Sabía que si pasaba primero en las tres metas volantes me vestía de azul y al final así ha sido. Es muy especial subir al podio».

El bilbaino señalaba que hasta ayer «no era la carrera esperada. No me encontraba bien. En los primeros días intenté coger la fuga y me quedé cerca y el miércoles me deje llevar para ver si hoy –por ayer– podía escaparme y llegar a dos manzanas de donde vivo. Y subir al podio es perfecto. Queda un día e intentaré defender el maillot». Agradece que la Itzulia haya pasado por las capitales de Hegoalde: «Para mí Bilbao es lo mejor, pero también en Iruñea el primer día y en Donostia. Que haya tanta gente es bonito. No todas las carreras tienen tanto público».

El día más especial para los guipuzcoanos

Si Lastra fue el protagonista de la etapa que llegaba a su ciudad, los dos guipuzcoanos del Caja Rural que debutan en la Itzulia vivieron su día más emotivo el miércoles. Alex Aranburu destaca que fue «el día más especial porque pasamos al lado de casa, por las carreteras por las que nos entrenamos cada día. Miras a todos los sitios y ves a mucha gente conocida animando y es bonito».

Buscó la escapada, pero «estaba cara. Lo intentamos dos o tres veces, pero estaba muy difícil. Por lo menos al final entró Pardilla. Hemos metido corredores en la fuga todos los días. A ver si seguimos así y conseguimos entrar siempre». Fue el segundo Caja Rural en Donostia: «En la última subida cuando han cambiado el ritmo no pude seguir y entré en el segundo grupo con Matthews. Me veo bastante bien, pero me ha faltado un punto todavía. No es que esperara estar adelante, pero quería ver hasta donde podía aguantar. Estuve mejor que el día anterior y a ver si seguimos así y cogemos alguna escapada. Ese será el objetivo».

Jon Irisarri todavía vivió unas emociones mayores: «Pasar al lado de casa siempre es especial, pero además todos los chavales de la Ikastola Laskorain, que es donde estudié, salieron a animarnos y se me ha puesto la piel de gallina. Me puse a un lado en el pelotón porque sabía que iban a salir, pero no pensaba que fuera tanta gente. Fue un pasillo por todo Tolosa y todo el mundo diciendo mi nombre y resultó muy especial».

Sobre todo porque no estaba previsto que corriera la Itzulia en su debut como profesional: «Al principio estaba como reserva, pero el equipo me ha dado una oportunidad y me ha dado mucha ilusión correr la Itzulia. Es un sueño y verlo cumplido es una gran satisfacción. Correr el primer año profesional una carrera del World Tour te da una buena base para los siguientes. Aquí hay otro nivel, se va más rápido y para coger un punto es muy importante vivir esto».

Asume su cambio de rol. De pasar a ser un ganador como amateur a aguantar lo que puede: «En aficionados era un rematador, pero aquí para rematar tienes que ser un fenómeno. Hay que trabajar mucho para hacer cosas bonitas. Tengo mucha ilusión y ganas de hacerlo bien. El objetivo es coger una escapada. Hasta ahora todos los días hemos metido a alguno y a ver si ganamos las metas volantes. Además Rosón sabíamos que estaba fuerte e intentamos ayudarle todos».