Amaia U. LASAGABASTER
Derbi en Ipurua

El Eibar se queda en el andén

Un gol en el descuento da el derbi al Athletic, que se coloca en la sexta plaza. El Eibar, que jugó en inferioridad durante más de media hora por la expulsión de Escalante, se queda a seis puntos y enfadado con la actuación arbitral.

EIBAR 0

ATHLETIC 1


El Athletic se llevó el derbi de Ipurua. En el descuento y con polémica, para dar más salsa a un partido que ya iba sobrado de alicientes. Una falta inexistente, cuando no en sentido contrario, concedió una última oportunidad de gol a los rojiblancos; la repelió magistralmente Yoel a la primera pero Raúl García, siempre atento y casi siempre letal, aprovechó el rechace para firmar el 0-1.

Una victoria que puede resultar definitiva. Si no para el Athletic, que alcanza la sexta plaza pero con la Real pegada a los talones, sí posiblemente para el Eibar. Los azulgranas se sabían ante una final, obligados a ganar a su más inmediato predecesor, y recuperarle además el golaverage contrario tras la derrota en San Mamés de la primera vuelta. La pelearon como tal pero acabaron encajando una segunda derrota consecutiva que les deja a seis puntos del Athletic. Con cinco jornadas por delante todavía, no es descartable que todavía les pase algún tren por delante pero de momento se quedan en el andén y con la sensación de que esa será su posición, y no es poco, cuando acabe la temporada.

Desde luego el de ayer no lo miraron como las vacas. Fueron a por él y de ahí su desazón a la conclusión del encuentro. Con Gálvez e Inui como novedades del once, en detrimento del sancionado Lejeune y Bebé –que finalmente se quedó incluso fuera de la convocatoria por una infección en el pie–, el Eibar dio cuerpo al guión que había adelantado su técnico la víspera. El mismo, en realidad, de todas las semanas, aunque con un puntito extra de intensidad. Por las connotaciones del encuentro y por tener que aplicarlo ante un rival parecido. Que no lo fue durante casi todo el encuentro porque prácticamente desde el mismo inicio se vio claramente quién era el titular del campo.

No es casualidad que transcurrieran 25 minutos antes de que Yoel tuviera que detener su primer balón, un disparo lejano y sin mucha fuerza de Raúl García que el gallego atajó sin esfuerzos. Tampoco es que Kepa Arrizabalaba tuviera que lucirse mucho más, aunque desde luego sí ocupó más plano en pantalla. Porque el balón, la iniciativa, el ritmo, eran de los armeros, a los que, sin embargo, les costaba reflejarlo en ocasiones claras. En buena medida porque lo mejorcito del Athletic estuvo en su defensa –con Laporte y, sobre todo, Yeray casi infranqueables– pero también porque a los propios atacantes locales les faltó cierta claridad en los últimos metros, bien para colocar el balón en el área, bien para rematarlo.

Pareció regresar aún más entonado el Eibar, ya sin el lesionado Luna, tras el descanso. En apenas cuatro minutos botó dos córners y forzó a Arrizabalaga a lucirse con un balón de Pedro León para Enrich. Pero cuando más felices parecía prometérselas, a Escalante se le cruzó el cable. Fea entrada por detrás a Muniain y el árbitro, que tampoco necesitaba mucho ayer para sancionar a los locales, le mostró la roja directa.

Aguantó, aún así, el tipo el Eibar, que incluso fue capaz de generar peligro todavía. Pero, con media hora por delante, también el Athletic dio un pasito adelante, si quiera para equilibrar las cosas sobre el césped. Cuando el empate parecía cantado, el gol de Raúl García reventó el derbi.