NAFARROA BUSCA REFORZAR EL CAMBIO

En Nafarroa, al igual que sucedió en mayo, unos pocos votos pueden marcar la diferencia. UPN-PP puede perder el segundo diputado y habrá fuerzas que se queden sin escaño. En el Senado, puede vivirse un vuelco histórico si Cambio-Aldaketa se impone a la derecha.

La lehendakari Uxue Barkos declaró el jueves que estos comicios no son una reválida o segunda vuelta de las elecciones de mayo, en las que en Nafarroa se puso en marcha el cambio tanto en el Gobierno navarro como en la mayoría de los ayuntamientos. Es cierto, Barkos seguirá gobernando de la misma manera sea cual sea el resultado de mañana. Y otro tanto se puede decir de Joseba Asiron, de Arturo Goldaracena, Koldo Leoz, Eneko Larrarte o cualquier de los alcaldes navarros.

Sin embargo, a nadie se le escapa que en estas elecciones, además de escoger a los representantes de Nafarroa en el Congreso y en el Senado, también se pone a prueba, en cierto modo, el cambio político iniciado en mayo. Dicho de otra manera, un buen resultado de las fuerzas del cambio en las urnas servirá para reforzar esta apuesta. En el conjunto del Estado, se eligen las dos cámaras, pero en Nafarroa estos comicios se han planteado como un plebiscito entre el cambio y el inmovilismo. O así lo aprovechará quien venza el domingo.

Y es que las fuerzas siguen estando muy parejas en el herrialde. No hay que olvidar que si Ciudadanos hubiese logrado apenas 200 votos más en mayo, el cambio que hoy vive Nafarroa habría seguido siendo una quimera. Echando un vistazo a las encuestas, lo único claro es que un puñado de votos puede decidir la balanza en un sentido o en otro.

Las encuestas han dado que UPN-PP puede lograr dos de los cinco diputados que se eligen el domingo, pero esto es algo que está en el aire y tampoco sería descartable un escenario en el que los cinco diputados pertenecieran a cinco formaciones diferentes. En este caso, el principal derrotado sería la coalición UPN-PP. En los últimos días, la derecha política y mediática ha hecho un llamamiento al voto útil, a centrar el voto en UPN-PP y evitar sustos que pudiera provocar una irrupción de Ciudadanos, que en cualquier caso, no tiene opciones a escaño y en Nafarroa juega en campo contrario debido a su discurso extremadamente centralista y antiforal.

Los tres (o cuatro) diputados restantes serán muy caros. Optan a ellos Podemos, Geroa Bai, EH Bildu y PSN. Si UPN-PP retiene su segundo, no hay diputados para todos. Y la cosa se dilucidará en pocos votos. Cada papeleta puede ser determinante.

opción de victoria en el Senado

Donde sí que puede perder el primer puesto UPN-PP es en el Senado. La candidatura Cambio-Aldaketa presenta a Anika Luján, Patxi Zamora e Iñaki Bernal, que cuentan con el apoyo de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos y Unidad Popular. Las cuentas son claras y si se suman los votos de las cuatro fuerzas se superaría ampliamente a UPN-PP, logrando que en la cámara de representación territorial cuatro de los cinco senadores navarros estén a favor del cambio. A los tres candidatos de Cambio-Aldaketa habría que sumarle el escaño de Idoia Villanueva, senadora por designación autonómica.

Pero aquí tampoco hay que lanzar las campanas al vuelo. Existe la incertidumbre de si el electorado será suficientemente disciplinado para votar al Congreso una de las cuatro fuerzas del cambio y marcar los nombres de los candidatos de otra marca, Cambio-Aldaketa, al Senado. En los últimos días, se han sucedido los llamamientos a actuar en este sentido.