El momento y la forma ideal de sacudirse los fantasmas

Ezkurdia-Zabaleta remontan un 10-1 inicial y un 21-20 para atrapar en la tabla a Olaizola II-Imaz.

OLAIZOLA II-IMAZ 21

EZKURDIA-ZABALETA 22

Esta decimoprimera jornada del Parejas podía suponer un punto de inflexión en el campeonato y las cosas difícilmente podían haberle salido mejor a Aspe, que tiene a dos parejas virtualmente en semifinales y que metió a Ezkurdia-Zabaleta de pleno en la lucha por otra con una victoria tan sufrida como importante.

Y para la promotora eibarresa casi tan importante como ese punto de oro fue la forma de conseguirlo, con una Bombonera en ebullición, claramente decantada por su pareja y con Joseba Ezkurdia sacudiéndose esos fantasmas que últimamente le vienen persiguiendo, como quedó claramente patente durante el extraño partido de ayer en el Labrit. Con 21 iguales, el de Arbizu se fue al suelo trastabillado al poco de sacar, pero aprovechó el poder de Zabaleta para recuperar la verticalidad y, tras dos buenos pelotazos de su zaguero, buscar la pelota para cortarla al txoko y obtener un punto tan sufrido como vital en sus aspiraciones.

Con las condiciones de los dos pelotaris de la Sakana, los dos últimos tantos que se dieron el punto –el 21 iguales lo consiguió el de Arbizu castigando atrás a Imaz– no deberían ser nada extraordinario, pero por lo que sea, Ezkurdia y Zabaleta no son capaces de mantener una línea regular en el tiempo, lo que les lleva a llevarse malos tragos como el sufrido ayer.

Aimar, a lo suyo

Porque ayer les volvió a costar horrores sumar como pareja y eso, ante un Aimar en estado de gracia, pocas veces suele salir bien. Comenzaron fallones los de Aspe y el de Asegarce, que sabe que debe aprovechar su estado de forma, lo aprovechó para abrir un hueco que parecía definitivo (10-1).

Zabaleta revertió su mal inicio pero la incapacidad de Ezkurdia de aprovechar su dominio demoró el equilibrio en el marcador hasta el 16 iguales, primer empate del partido. Imaz fue el que a partir de entonces acusó el castigo (17-20), pero aunque Aimar sabe manejarse en estas situaciones (21-20), los de Aspe sumaron más al final.