Subidas

La bolsa o la vida. La bolsa y la vacuna. Anuncia una farmacéutica que su vacuna tiene un 90% de efectividad para combatir la covid-19 y suben las bolsas de todo el mundo. ¿Por qué? ¿Quién asegura que este anuncio es cierto, verificable, definitivo y no una acto propagandístico de la empresa? Contexto: un lunes, tras la proclamación de presidente electo de Joe Biden, con el monstruo color naranja en un silencio impostado, a la espera de otras reacciones, este anuncio es el disparo para entender que ha cambiado el destino de casi todo, que esa farmacéutica lo sabía antes de las elecciones y se calló y que ahora se une a la fiesta y al hundimiento rotundo del saliente Trump.

Es una manera estratégica de entender esta comunicación con mensaje positivo y esta subida vertiginosa, que en entornos próximo se concreta en los valores de empresas dedicadas al turismo. Por lo que, mientras se suman restricciones peninsulares bastante drásticas para combatir esta pandemia, llegando a situaciones casi insoportables, este anuncio muy precipitado puede crear una sensación de victoria, de que ya no pasa nada, que esa vacuna que hace subir las bolsas llegará pronto, o que ya está aquí, como se vacunarán todos, se acabará con esta situación de manera milagrosa. Ha producido subidas en la bolsa, pero es posible que provoque, de momento, más subidas de todos los parámetros que nos colocan en una segunda ola que empieza a parecer un tsunami.

En Bolivia se produce la toma de posesión del nuevo presidente electo, Luis Arce, donde se restituye un orden democrático roto por un golpe de estado contra Evo Morales y vemos imágenes curiosas como el cuñado de Urdangarin junto a Pablo Iglesias con traje y corbata que le desdibuja más y escuchamos una versión del himno español de verbena.