Comedia de acción entretenida
Dirige la cinta Phillip Noyce que, pese a que lleva unos años un poco a la deriva, dirigió tres películas míticas de los 90: “El coleccionista de huesos”, “Peligro inminente” y “Juego de patriotas”. Tal vez encontramos ahí la razón de que “Fast Charlie” rezuma ese aroma tan noventero; Noyce regresa a sus raíces para narrarnos la odisea de Charlie. Las piezas narrativas que utiliza le serán tremendamente familiares y previsibles, pero personalmente me he llevado una grata sorpresa.
Pierce Brosnan encarna a Charlie Swift, un eficiente y discreto sicario que lleva 20 años trabajando a las órdenes de Stan, jefe de la mafia de Orlando. Podríamos comparar al personaje de Brosnan con el típico personaje que últimamente interpreta Liam Neeson: héroe maduro del cine de acción -y que, sinceramente, aburre un poco-. A diferencia de los personajes que encarna Neeson, Charlie Swift transmite mucha más vulnerabilidad, tiene un sentido del humor muy especial, un tono mucho más fresco y, sobre todo, más matices. Refleja la necesidad del retiro bajo la perspectiva de un hombre violento.
‘‘Fast Charlie” es una película sencilla, nada pretenciosa, que te ofrece exactamente lo que te está vendiendo, ni más ni menos. Secuencias de acción típicas del género rodadas en modo automático, sin demasiada personalidad, pero bien ejecutadas. Un film previsible, que no le va a cambiar la vida, pero que sabe manejar y exprimir a la perfección los recursos que tiene. Una comedia de acción muy entretenida que equilibra muy bien su humor negro con pinceladas de violencia y con toques de romance.
Mención aparte merece la presencia del actor James Caan: tiene un pequeño papel en el film, siendo esta su última actuación antes de su fallecimiento en 2022.