La primavera meteorológica, que comprende los meses de marzo, abril y mayo, ha sido en este año la más seca en lo que va de este siglo en la CAV e incluso de los últimos 50 años en Gipuzkoa.

En cambio, la temperatura se ha situado en general en valores normales, tan solo 0,1 grados centígrados por encima de la media, con la excepción del litoral, donde se ha comportado de manera cálida en el extremo oriental y de manera fría en el extremo occidental.

Según los datos recogidos por Euskalmet, las cantidades de precipitación total durante toda la primavera han estado cerca o por debajo de los 200 litros por metro cuadrado, incluso por debajo de los 100 en zonas del sur de Araba.

También bajas en Nafarroa e Ipar Euskal Herria

Esta tendencia también se ha registrado en el resto de territorios de Euskal Herria, aunque todavía no se dispone de un balance tan detallado.

En Nafarroa, el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente ha indicado que mayo fue «muy seco» en la parte central del herrialde y «seco» en el resto. En Erribera y las zonas de mayor altitud del norte se han registrado valores entre el 50% y 75% de la media, mientras que en el resto ha sido de entre 25-50%.

En general, las precipitaciones registradas el mes pasado han estado muy por debajo de lo esperable.

Abril también tuvo un carácter pluviométrico «muy seco» en Nafarroa, especialmente en Pirineos y en la zona noroeste. El porcentaje de precipitación promedió un 42% con respecto a las cifras normales, según indicó Aemet.

Para Ipar Euskal Herria, Meteo France señala que, en el conjunto de la primavera, el número de días de lluvia ha sido inferior a lo normal especialmente en «la fachada atlántica y a lo largo de los Pirineos».

En relación a la media estacional de referencia de las precipitaciones acumuladas en el periodo 1981-2010, en Ipar Euskal Herria durante esta estación apenas se ha recogido un 50%.

Menos de la mitad de lo esperable

Volviendo a los datos de Eukalmet, solo una estación, la de Eskas (Artikutza, en la cuenca alta del Urumea), ha llegado a superar los 300 litros por metro cuadrado, pero en prácticamente todo el territorio ha llovido menos de la mitad de lo esperable en esta época del año, de manera que se trataría de la primavera más seca de los últimos 50 años o más, especialmente en Gipuzkoa, a excepción del Goierri.

En el Gran Bilbao, los valores son similares a los de 2011, la primavera más seca de los últimos años en esta zona.

Entre los escasos días en los que las lluvias fueron abundantes, destacaron el 19 de marzo y el 11 de abril, con una larga secuencia seca de unos 20 días entre ambas jornadas.

En mayo se produjeron precipitaciones intensas, acompañadas de tormentas, que dejaron nuevos récords en algunas estaciones. Así, en Zaldiaran, Derio y Sangroniz se superaron las intensidades de precipitación en una hora registradas en este siglo; lo mismo ocurrió con las intensidades registradas en 10 minutos en las estaciones de Zaldiaran y Alegia.

Temperaturas frías

En cuanto a temperaturas, esta primavera se encuentra entre las más frías de lo que llevamos de siglo en el conjunto de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. No obstante, los valores medios han sido normales, aunque han tendido a cálidos en el litoral oriental y a fríos en el occidental.

En la costa los registros han rondado los 13 grados, mientras que en Lautada se han acercado a los 10 grados, aproximadamente 0,1 por encima de lo normal para el conjunto del territorio, según el periodo normal 1981-2010.

Además de presentar contrastes significativos, las temperaturas han superado varios récords. Por un lado, las máximas de los días 30 y 31 de marzo (en Oleta, 30,5 grados; y en Mungia, 29) y, por otro, las mínimas registradas el 16 de abril (Berastegi, -2,9; y Orozko, -1).