Sánchez se atribuye haber terminado al menos con el «bloqueo» impuesto por el PP

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha defendido su candidatura a la Presidencia del Gobierno español con la promesa de un gabinete «reformista y de progreso» y ha pedido el respaldo de los partidos que desean «un cambio».

Pedro Sánchez se somete en el Congreso a la segunda votación de su candidatura, tras ser derrotado en la celebrada el pasado miércoles. En su intervención, ha asegurado que la mayoría de los españoles, representados en la Cámara, desean un cambio de Gobierno respecto al ejercido desde 2011 por el PP.

«Acepté el encargo del rey para solventar el problema creado por Rajoy y que haya normalidad democrática», ha explicado Sánchez, quien se ha atribuido el mérito de haber acabado con el «bloqueo».

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha replicado a Sánchez que «su fiesta ha llegado al final. Usted ha perdido las elecciones, ha perdido esta investidura, nos ha hecho perder a todos el tiempo, ha generado falsas expectativas y las ha defraudado. Ha puesto las instituciones al servicio de su supervivencia. Eso también es corrupción».

Rajoy ha mostrado su rechazo a la «contrarreforma» que pretende el líder del PSOE. «Lo que hay que corregir es lo que no funciona. Lo contrario se llama síndrome de Adán, algo propio de mentalidades inmaduras que piensan que el mundo comienza cuando llegan ellos», ha advertido.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha emplazado a Pedro Sánchez a aceptar desde esta misma noche una nueva negociación.

Tras las duras acusaciones que Iglesias lanzó a Sánchez en la anterior sesión de investidura, el líder de Podemos se ha mostrado conciliador y ha tendido la mano para formar un gobierno de coalición «a la valenciana».

«A veces las discusiones más agrias preceden a los momentos más dulces, ojalá después de esta noche el acuerdo al que lleguemos pueda llamarse el acuerdo del beso», ha dicho.

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha pedido al PP y a su líder, Mariano Rajoy, que se abstengan en la votación de investidura de Pedro Sánchez, ya que no es capaz de sumar ni construir –ha argumentado– y no ha intentado siquiera llegar a acuerdos.

También ha incidido en que esta tarde van a votar juntos quienes quieren «que se rompa España», en alusión a Podemos y a los independentistas, y quienes quieren que «se pudra», en referencia al PP.