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Convocan manifestación para pedir a Macron que acabe con el hacinamiento en las cárceles

Diecisiete asociaciones de defensa de los derechos humanos han pedido este jueves el fin del hacinamiento en las cárceles del Estado francés con una manifestación. Solicitan al presidente francés, Emmanuel Macron, «que pase de las palabras a los hechos» y reduzca la densidad de personas presas.

Un funcionario camina por la cárcel de Sequedin, cerca de Lille. (Denis CHARLET/AFP)

Casi una veintena de asociaciones han convocado este jueves una manifestación para pedir al presidente francés, Emmanuel Macron, que «pase de las palabras a los hechos» y ponga fin al «hacinamiento» en las cárceles del país.

Ante un creciente número de detenidos y encarcelados en el último año, diecisiete asociaciones de defensa de los Derechos Humanos y los derechos de los presos han convocado una serie de marchas un año después de que instaran al Gobierno hace un año a aprovechar la «oportunidad histórica» que suponía el coronavirus para disminuir la población carcelaria.

El 3 de junio de 2020, los firmantes de la carta, entre los que se encuentra el exabogado Eric Dupond Moretti, desde entonces ministro de Justicia francés, expresaron su más profunda «esperanza» ante la posibilidad de que la crisis sanitaria permitiera por primera vez en dos décadas reducir la cifra de presos en las cárceles del Estado.

Así, solicitaron al presidente que hiciera todo lo posible para evitar la «reactivación» de la población carcelaria y el «hacinamiento crónico» que valió al país una condena del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en enero de 2020.

Sin embargo, tal y como alertan ahora, el Ejecutivo ha permanecido «sordo» ante estas peticiones, ya que desde julio de 2020, la población carcelaria ha ido aumentando. El 1 de mayo había 6.689 personas más detenidas en las prisiones.

65.000 para 60.000 plazas

Así, a principios del mes pasado el Estado francés contaba con 65.384 presos para un total de 60.799 plazas operativas, lo que supone una densidad del 108%. El 1 de julio de 2020 eran 58.695 las personas encarceladas (una densidad del 96,9%).

«El Ministro de Justicia (...) no tomó las medidas estructurales necesarias y (...) ha puesto en marcha incluso nuevas medidas que corren el riesgo de aumentar aún más la población carcelaria», han indicado las organizaciones, entre las que se encuentran el Observatorio Internacional de Prisiones (OIP), el Sindicato de la Magistratura o la Asociación Nacional de Jueces de Ejecución de Sentencias, entre otras.

En este sentido, han destacado que aún «hay tiempo para revertir la tendencia y poner en marcha una política proactiva de deflación carcelaria». «El hacinamiento en las cárceles no es inevitable», han asegurado.