Este congreso internacional es muestra y resultado del deseo del Ayuntamiento de Iruñea de fortalecer el trabajo que lleva realizando en la lucha contra todo tipo de violencias contra las mujeres. El evento, que se celebra desde hoy hasta el sábado, pretende ser un espacio de reflexión y estudio donde se aúnen diversas perspectivas. Participarán, por ejemplo, profesionales del Derecho, de los medios de comunicación o de la investigación, además de activistas feministas. También se escucharán experiencias y voces de distintos países.

El alcalde Joseba Asiron les ha dado la bienvenida a todas y ha constatado que le preguntan todos los días qué ha sucedido en Iruñea para que se haya convertido en una ciudad referencial en este tema. «Se han conjugado una serie de factores: un movimiento feminista fuerte, y articulado, una sociedad harta que no ha dudado en salir a la calle para hacer frente a estas violencias, y una institución que ha recogido el guante de la sociedad».

Ha indicado que tienen «mucho que aportar y, sobre todo, que aprender». Por ejemplo, de las estrategias que se llevan a cabo en otros lugares del mundo, poniendo el foco en lo más importante: «La identificación de causas y factores de las violencias sexistas, el análisis profundo estas y las líneas de trabajo a seguir».

La ley foral, pionera

Mertxe Leranoz, directora del Instituto Navarro de Igualdad, ha hablado de la «pionera» ley foral navarra que «parte del concepto amplio de la violencia, contemplando también el feminicidio, la trata de mujeres y niñas o la prostitución. Va más allá porque considera a las mujeres poseedoras de derechos, así como sus hijas e hijos».

Según ha apuntado, los ejes del plan de acción de esta ley foral son el cambio de valores; la atención integral a las mujeres que enfrentan estas violencias, así como a sus hijas e hijos; su protección, reparación y la justicia; la formación profesional; y la coordinación entre distintas instituciones para dar cumplimiento a esta ley y velar por el derecho de las mujeres de vivir una vida sin violencias.

Dos hitos

Por su parte, la técnica de Igualdad del Ayuntamiento de Iruñea, Zaloa Basabe, ha destacado dos hitos fundamentales: «El primero, la labor que durante décadas ha hecho de forma silenciada, señalada y cuestionada el movimiento feminista de esta ciudad. Nos enseñó a identificar todos los tipos de violencia, nos invitó a las calles a denunciarlos. A día de hoy continúa trabajando para complejizar las miradas, para mostrar que es la estructura social la que produce y reproduce las violencias. Es importante este reconocimiento, sin su labor no estaríamos aquí».

En segundo lugar, ha recordado el verano de 2016, concretamente la respuesta ciudadana de esos días, «contundente, rotunda, frente a una de las agresiones que se dan no solo en entornos festivos y Pamplona, pero también en entornos festivos y Pamplona. Es sobre esa respuesta ciudadana, basándonos en las demandas de las mujeres, como desarrollamos nuestra actuación e intervención».

Después del verano de 2016 el primer protocolo del año anterior fue sometida a un proceso de revisión importante. Este protocolo incluye la intervención, el acompañamiento y la respuesta institucional y ciudadana. Y va acompañada de una campaña de sensibilización y prevención que han extendido a las fiestas de los barrios de Iruñea.

Una mano roja transmite la adhesión a la campaña, además de un rechazo firme a las agresiones, que «no son inevitables sino producto de una violencia sistemática de hombres contra mujeres sobre una eje de sumisión». En esta respuesta es la ciudad la que se posiciona. La institución asume el compromiso de visibilizar, denunciar e implementar los recursos necesarios. Los recursos se ponen en marcha con el respeto y la protección de la mujer.

Más información, en congresoviolenciassexistas.com.