GARA
BAGDAD

Tropas iraquíes toman otro puente sobre el Tigris y la Universidad de Mosul

Tras un primer frenazo debido a los contraataques del ISIS, la campaña para recuperar Mosul se acelera. Las fuerzas iraquíes alcanzaron el segundo de los cinco puentes de la ciudad y entraron en la Universidad, base operativa y productora de armas químicas del ISIS.

El Ejército iraquí y sus fuerzas aliadas entraron ayer en el complejo universitario de Mosul, capturando algunos edificios, en una batalla sangrienta donde el ISIS aún estaría ofreciendo mucha resistencia. La noticia se difundió junto a otras informaciones que anunciaban la llegada de esas fuerzas a un segundo puente sobre el río Tigris que atraviesa la mayor urbe del norte de Irak.

De confirmarse estas noticias, con el control de la parte este del puente Al-Hurriya (Libertad), las fuerzas iraquíes controlarían ya dos de los cinco puentes de Mosul y limitarían aún más las capacidades de transportar suministros y refuerzos del ISIS de la parte oeste, que controlan por completo, a la del este, de la que solo conservarían un 30% del control.

El complejo universitario de Mosul, situado en la zona oriental de la ciudad, era utilizado por el ISIS como base operativa. Los responsables del Gobierno iraquí habían dicho en ocasiones que habrían utilizado los laboratorios de la facultad de Químicas para producir armas químicas. Las fuerzas iraquíes, según declaró el general Abdelamir Yarala, jefe de operaciones especiales del Ejército, habrían recuperado así mismo el control de numerosas sedes gubernamentales, como la del Gobierno de la provincia de Nínive, el Ayuntamiento de la ciudad y los departamentos de Agricultura, Planificación Urbana y el de Inmuebles Públicos.

La ofensiva se acelera

La campaña para recuperar Mosul, principal bastión del ISIS y la «joya de su corona», comenzó el 17 de octubre del año pasado, y en sus operaciones participan más de 100.000 efectivos pertenecientes al Ejército iraquí, las milicias chiíes y los peshmerga kurdos. Las fuerzas iraquíes cuentan con el apoyo aéreo de EEUU. Sin embargo, en un principio, a pesar de la abrumadora diferencia de medios y de efectivos, la campaña militar tuvo que ralentizarse drásticamente debido a la bien planificada defensa y a los contraataques del ISIS. Según distintas informaciones, en casi tres meses, cientos de kamikazes se habrían cobrado ya la vida de más de 2.000 soldados iraquíes. No obstante, desde hace dos semanas la campaña militar se ha vuelto a relanzar y los progresos en el este de la ciudad parecen haberse acelerado mucho.

La estrategia de las fuerzas gubernamentales pasa por recuperar primero el este de la ciudad y, una vez asegurada esta ribera del Tigris, iniciar la captura del oeste, la zona más amplia y densamente poblada de Mosul. Con la toma de los dos puentes, que unen al norte y al sur las dos partes de la ciudad, crece el optimismo en torno a una pronta caída de los tres restantes.

Cabe recordar que, con el objetivo de dividir la ciudad en dos y de socavar la capacidad del ISIS de transferir sus fuerzas de una ribera a la otra, los cinco puentes de Mosul fueron bombardeados por los estadounidenses causando serios daños a sus estructuras, pero sin destruirlos por completo, al parecer, para que tras la reconquista de la ciudad puedan ser más fácilmente reconstruidos.

Tras la toma del puente Al-Hurriya, en el sur de la ciudad, las tropas iraquíes ganaron confianza y continúan su avance hacia el norte, en dirección al puente Al-Hadidi, llamado también el puente Antiguo y que está situado en el centro de Mosul.