Aunque la juventud y sus formas de ocio llevan tiempo siendo escudriñadas, y muchas veces censuradas, como factores propagadores del covid, lo cierto es que una parte sustancial de los contagios se producen en otros ámbitos de contacto entre las personas. En concreto, en el espacio educativo y en los puestos de trabajo, donde, por ejemplo, se produjeron el 82,5% de los brotes detectados en la CAV entre marzo y junio de este año.

Así consta al menos en el documento remitido por el Departamento de Salud al Parlamento a petición de EH Bildu, donde se detallan los brotes detectados en ese periodo en función de los ámbitos de contagio. Se trata, según se puntualiza, de brotes con tres o más casos implicados, el informe no contempla por tanto todos los contagios habidos en esos cuatro meses, pero no es una muestra desdeñable, ya que se aportan datos concretos de nada menos que 900 brotes y un total de 5.261 positivos.

Y la información remitida indica que el educativo es el ámbito donde mayor número de brotes de produjeron, 427, casi la mitad del total. Esos brotes provocaron 2.170 contagios, el 41%.

Detrás de los centros escolares, el puesto de trabajo fue el lugar donde más brotes de covid se detectaron entre marzo y junio, 316, lo que representa algo más del 35%. 1.651 contagios estuvieron vinculados a esos brotes, y más de un tercio de ellos, 122, se produjeron en abril, un mes especialmente complicado en el ámbito laboral, que superó al educativo como primer foco.

El ámbito social, el 8,1%

A mucha distancia, el ámbito social, que comprende en el informe las reuniones familiares o de amigos, el espacio de uso público (iglesias, gimnasios, etc.), los eventos organizados, locales de ocio, las actividades culturales (teatro, museos, templos etc.), hoteles y alojamientos, establecimientos de restauración, centros estética y las actividades deportivas, entre otros lugares de encuentro, fueron origen de 73 brotes, el 8,1%. Y aún más atrás en el listado aparecen los ámbitos sanitarios y sociosanitarios, el de los colectivos socialmente vulnerables y otros aún más minoritarios.

Aunque, como se ha dicho, el documento solo refleja los brotes con tres o más casos implicados, sirve para poner de relieve el impacto de la pandemia en espacios, como el laboral, en los que se ha hecho mucho menos hincapié desde la administración que en otros como el ocio.