«Siguen en la misma posición de estos cinco años, como si los atentados de ETA no hubiesen acabado». Aitor Esteban, portavoz del PNV, ha sido el primero en incluir la resolución del conflicto vasco en el debate de investidura en el Congreso español. Ha recordado que el PP no quiso firmar un texto con motivo del quinto aniversario del cese de ETA. Un documento que el resto de formaciones sí iba a firmar, aunque Esteban ha aprovechado para criticar a la izquierda abertzale, considerando que también «puso matices».
Esteban ha sido contundente. No habrá apoyo al PP hasta que no cambie de actitud. Ha enumerado una larga lista de agravios, desde los retrasos en las obras del TAV hasta los intentos de reabrir Garoña, pasando por los recursos ante el Tribunal Constitucional presentados ante el Tribunal Constitucional.
Sobre las cuestiones nacionales, ha reiterado: «Si quiere fórmulas para una solución mínimamente duradera, le recuerdo los ingredientes. reconocimiento nacional, bilateralidad, árbitro neutral».
Sobre su posible apoyo a otros planes, como los presupuestos, el jelkide no se ha alargado. Únicamente se ha limitado a a señalar que «si quiere nuestro concurso, si pretende colaboración, la relación hacia la autonomía vasca y sus instituciones deberá ser diferente. Comenzando por la judicialización de la política».
Respuesta de Rajoy
Rajoy, por su parte, ha eludido el debate profundo y ha preferido centrarse en los asuntos concretos. Ha remarcado que el TAV estará en 2019 y que si existen retrasos es por problemas técnicos en el nudo de Bergara.
Sobre resolución, la ha ventilado en una frase: exigir a ETA que se disuelva. Nada sobre política penitenciaria o sobre cómo llevar a cabo el desarme. Y eso que en las réplicas Aitor Esteban ha vuelto a sacarle el tema.
Tampoco ha entrado el presidente en funciones a valorar las referencias de Esteban hacia Valonia, que ha sido capaz de vetar un acuerdo de la UE y Canadá. Y eso que había dicho que la CAV disfruta de la «mayor autonomía» posible. Tampoco ha respondido cuando el jelkide, recordándole su frase de «la ley se cumple», le ha remarcado que las competencias de prisiones o empleo están en el Estatuto de Gernika pero nunca se han transferido.
Rajoy, impasible, se ha limitado a invitar al PNV a participar en la gobernabilidad del Estado.