Citando fuentes de la inteligencia estadounidense, ‘The Wall Street Journal’ hizo público el domingo las conclusiones de un informe del Departamento de Estado que señala que tres investigadores del laboratorio de Wuhan, en el centro de China, enfermaron en otoño de 2019, sembrando de nuevo dudas sobre el foco inicial de la pandemia.

«No hubo ningún caso de covid en ese centro en el otoño de 2019. La noticia es completamente falsa», ha afirmado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Zhao Lijian, en rueda de prensa.

La tesis del origen natural pero con fuga accidental

El informe al que alude el rotativo económico estadounidense se redactó en los últimos días de la Administración de Donald Trump y asegura que los síntomas de los investigadores eran consistentes tanto con el covid-19 como con enfermedades estacionales comunes.

Ese análisis refuerza la teoría de que el virus probablemente se originó de forma natural, a partir del contacto entre animales y humanos.

No obstante, no excluye la posibilidad de que su propagación en Wuhan fuera el resultado de una fuga accidental del Instituto de Virología, donde se estaba llevando a cabo una investigación sobre el coronavirus en murciélagos.

El Gobierno chino ha negado repetidamente que el virus se haya escapado de uno de sus laboratorios.

Desajuste de fechas

China informó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) de que el primer paciente con síntomas similares a los del covid-19 se registró en Wuhan el 8 de diciembre de 2019.

Muchos epidemiólogos y virólogos creen que el SARS-CoV-2 empezó a circular en noviembre de 2019 por la ciudad de Wuhan, mientras Pekín mantiene que el primer caso confirmado fue un hombre que enfermó el 1 de diciembre.

El citadio diario destaca que el Instituto de Virología de Wuhan no ha compartido datos sin procesar, registros de seguridad y registros de laboratorio sobre su extenso trabajo con coronavirus en murciélagos.