Xabier Mikel Azparren (Euskaltel-Euskadi) ha logrado una victoria de mucho mérito, la primera de su carrera, en la segunda etapa de la Volta ao Alentejo con la que, además, se sitúa líder de la ronda portuguesa. En una jornada de 187,7 kilómetros disputada este jueves entre las localidades de Beja y Portel, el guipuzcoano se ha impuesto al sprint a Tiago Machado (Radio Popular-Paredes), con quien ha llegado ligeramente destacado del grupo principal.
Tercero, a siete segundos del dúo cabecero, ha llegado el líder de la carrera hasta hoy, el venezolano Orluis Aular (Caja Rural), por lo que cede el testigo de líder a Azparren. Además, su compañero Iker Ballarín es quinto, a 13 segundos.
El corredor del Euskaltel-Euskadi y Machado se han escapado del pelotón en los últimos kilómetros y han logrado mantener el pulso al gran grupo, que no ha sido capaz de neutralizar la aventura.
Al término de la etapa Azparren se ha mostrado muy agradecido al trabajo de su equipo, que considera que «ha vuelto a estar un día más de 10» para ayudarle a lograr la victoria. «Ayer hicieron un gran trabajo que no se vio reflejado en meta con un resultado final y hoy ha sido todo lo contrario. El equipo ha llevado la carrera dura y me han protegido en varios abanicos», ha señalado corredor vasco, muy feliz por el triunfo.
En cuanto al desarrollo de la etapa, Azparren ha explicado que «el circuito final era duro» y por ello el Euskaltel ha «decidido jugar mi carta desde lejos». «Por eso, después del primer paso por meta, varios compañeros han atacado para que la carrera no se parara en ningún momento. Y cuando he visto que la gente había gastado lo que tenía, y que yo podía jugar mi carta, he arrancado a falta de 12 kilómetros y he logrado esa victoria que tanto llevábamos persiguiendo», ha relatado.
«Y con el doble premio de coger el liderato y quitarme mucho trabajo de cara a la contrarreloj del sábado», se ha congratulado Azparren en declaraciones distribuidas por su equipo.
Por su parte, el director deportivo del equipo vasco, Jorge Azanza, considera que «esta victoria es la recompensa al trabajo que venía haciendo el equipo en las últimas carreras». «Muchas veces cuando no hay un triunfo, el trabajo queda más deslucido. Esto le da la razón al correr como corremos, además de tener siempre corredores dispuestos a darlo todo como es el caso de Xabier Mikel», ha valorado.
Azanza está «seguro de que no es la última victoria que consigue» Azparren «por la raza que tiene corriendo». «Siempre hemos dicho que hay carreras en las que hay que optar a ganar, esta es una de ellas, y así lo han demostrado hoy. Espero que se continúe esta línea», ha añadido.
Walscheid, el más veloz en el GP Denain
El corredor alemán Maximilian Walscheid (Cofidis) ha rematado con victoria un emocionante sprint en la 63ª edición del Gran Premio Denain disputado a través de 200 km y en la que una escapada de cinco, con el esloveno Primoz Roglic incluido, ha sido anulada a 1.000 metros de la meta.
Walscheid (Leuven, 28 años), segundo clasificado 24 horas antes en la Nokere Koerse, ha podido rematar con éxito en un emocionante sprint que ha cerrado la carrera con salida y llegada en la localidad que da nombre a la prueba con un tiempo de 4h.42.24, a una media de 42,6 km/hora.
El ciclista germano ha superado al belga Dries De Bondt (Alpecin Fenix) y al francés Adrien Petit (Intermarché), poniendo punto final a una sequía de victorias que le duraba ya más de 2 años, desde que ganó 2 etapas en el Tour de Langkawi.
La clásica francesa del norte ha tenido movimiento, con un recorrido salpicado por 12 tramos de adoquines, concentrados la mayoría en la segunda parte de la carrera. Ahí ha sido donde se ha animado la jornada de fiesta ciclista. Hasta entonces, un grupo de 5 corredores han abierto carrera, entre ellos el veterano de 37 años neerlandés Niki Tersptra, ganador de Tour de Flandes y Roubaix.
La veteranía sin fuerzas no ha sido suficiente, ya que ha sido alcanzado después del séptimo sector de "pavé" de Monchaux Ecalions, a 33 de meta, acompañado entonces por Fretin y Paillot. Ha dado comienzo otra carrera, con nombres destacados asomando por delante, al quite de maniobras que se iban a producir, como Roglic y el colombiano Daniel Martínez.
Una escapada peligrosa se ha formado en el tramo de Maing Querenaing, 2,5 km de adoquines donde el Ineos ha cortado el pelotón tirando a saco con tres hombres, el ecuatoriano Jonathan Narváez, el estadounidense de 19 años Sheffield y el británico Turner, que han abierto hueco llevándose a rueda a Roglic y al francés Touzé.
A 10 kms de meta tenían 24 segundos de ventaja y la carretera ya ofrecía asfalto hasta meta, pista rápida hasta Denain. Cinco contra todos, y entre medias un puñado de segundos. Emoción y dudas sobre si llegaría o no la avanzadilla. Poco a poco se han ido las diferencias. Los relevos no han tenido el convencimiento necesario para evitar lo inevitable, y han sido cazados a 1 km de la línea.
El sprint se ha desatado de lejos. Muchos aspirantes. El primero en lanzar el órdago ha sido el francés Adrien Petit, tomando una buena posición para alzarse con la victoria, pero ha aparecido inmenso Walscheid para levantar los brazos y firmar su duodécimo triunfo profesional.
Esta vez no se ha quedado con la miel en los labios, como en Nokere, su potencia le ha permitido suceder en el palmarés del GP Denain al belga Jasper Philipsen, laureado en 2021.