La Fiscalía General de Nueva York publicó este viernes un video que muestra cómo varios guardias de seguridad de una prisión del estado golpean a un reo afroamericano que aparece esposado, con sus manos en la espalda, y que murió tras la agresión, ocurrida el pasado 9 de diciembre.
El vídeo, obtenido de las cámaras que portaban cuatro de los agentes y que no tiene sonido, muestra cómo estos golpean y patean al hombre, identificado como Robert Brooks, al que llevaron a una sala de enfermería del Centro Correccional Mercy, al norte del estado.
La grabación muestra cómo los guardias sostienen a Brooks y uno de ellos le da patadas en la parte inferior de su cuerpo con su zapato, mientras que otro le golpea en la parte superior
Be warned, the body camera video of a New York State prison guard beat-up squad beating and choking Robert Brooks to death is brutal. Its worse than George Floyd.https://t.co/D9FXepjgkW pic.twitter.com/KNoUrScxRU
— JB Nicholas (@JasonBNicholas) December 27, 2024
Mientras Brooks era golpeado en una camilla y tenía sangre en su cara, otros oficiales de corrección observaban sin hacer nada. Brooks, de 43 años, fue declarado muerto en la madrugada del 10 de diciembre en un hospital.
La fiscal general, Letitia James, -cuya oficina ha abierto una investigación sobre la muerte de Brooks- indicó que las imágenes, que consideró «impactantes y perturbadoras», se dan a conocer para aumentar la transparencia y fortalecer la confianza pública en estos asuntos.
James ha asegurado que hay una investigación «minuciosa» en marcha e incidió en que como fiscal general tiene la responsabilidad y el deber de brindar a la familia de Brooks, sus seres queridos y a todos los neoyorquinos «transparencia y rendición de cuentas».
En documentos presentados ante el tribunal esta semana, los investigadores de la Policía estatal indicaron que los «hallazgos preliminares» de la oficina del médico forense mostraron «asfixia por compresión del cuello como causa de muerte».
«Habrá responsables»
El comisario estatal de prisiones, Daniel Martuscello III, ha anunciado la expulsión inmediata de los implicados y la suspensión de empleo y sueldo de otros trece por este «acto vulgar e inhumano que ha acabado sin ningún sentido con una vida». Otro guardia ha dimitido. Además ha anunciado cambios «para garantizar que nunca pueda pasar algo parecido en nuestras instalaciones».
«Esto es un asesinato y habrá responsables», ha subrayado Martuscello. «Estas personas no representan la cultura del departamento ni nada de lo que defiende», ha remachado.
Según el ‘New York Times’, Brooks estaba cumpliendo una condena de 12 años tras declararse culpable en 2017 de agresión en primer grado por apuñalar a una exnovia. El día de la agresión, Brooks estaba siendo trasladado del Centro penitenciario Mohawk de Mercy.