La lehendakari del Gobierno de Nafarroa, María Chivite, reivindicó ayer los «buenos indicadores económicos y sociales» del herrialde como base de partida para una recuperación condicionada por «nubarrones» en forma de inflación, el incremento de precios de la energía o la falta de suministros.

En su intervención en el debate sobre el Estado de Nafarroa, Chivite dibujó en el Parlamento una versión muy endulzada de la situación de Nafarroa, recalcando indicadores como el PIB en crecimiento, o el aumento de la afiliación a la Seguridad Social, la recaudación líquida, las exportaciones y la confianza de los consumidores.

Incluso destacó los ratios en los que Nafarroa mejora las cifras de otros puntos del Estado y de Europa: «Somos la comunidad con menores índices de pobreza y desigualdad de España y la décima región europea».

Pese a los citados «nubarrones» y su repercusión en la industria y los hogares, Chivite aseguró que su Gobierno afronta el tiempo postcovid con «esperanza» gracias, en parte, al «esfuerzo histórico» que supondrán los fondos europeos, que la presidenta citó quince veces durante un discurso de cien minutos. Estos, a su juicio, favorecerán una salida de la crisis que será «con recursos, no con recortes». Y también con «consenso», y no con «confrontación», haciendo referencia al diálogo social y al plan de empleo acordado con una minoría sindical.

En el terreno de los anuncios, la lehendakari comunicó que antes de que acabe el año aprobarán más de 1.000 nuevas plazas en ofertas públicas de empleo. Y recordó además que este año materializarán dos transferencias y trabajará para que se materialice una tercera: sanidad penitenciaria, tráfico e Ingreso Mínimo Vital.

En el contexto de la pandemia, una de las áreas más destacadas es Salud. Al respecto, Chivite fijó como «reto principal» la mejora en atención primaria y en las listas de espera.

Chivite reivindicó asimismo un nuevo modelo energético, y citó también las ayudas dirigidas a entidades locales sin ánimo de lucro o a grandes y medianas empresas. Al mismo tiempo que apostaba por una transición energética justa, la presidenta navarra confirmó que 145 millones de los fondos europeos irán destinados a un proyecto faraónico como el TAV.

En cuanto al euskara, Chivite indicó que «tenemos un mapa escolar que garantiza que la oferta se desarrolla de manera equilibrada y siempre planificado desde los principios de voluntariedad y convivencia».

Claro que todas estas medidas dependen en gran parte de que logre aprobar las cuentas. En este sentido, el «acuerdo parcial» alcanzado con EH Bildu, sin llegar a materializarse en ningún documento firmado, encauza un previsible acuerdo.

«Apelo hoy aquí a todos los grupos parlamentarios a que aporten y contribuyan a la prosperidad de Navarra con las enmiendas presupuestarias», señaló Chivite. Y agregó que «el diálogo es y será nuestra herramienta de trabajo para buscar acuerdos. Pero es verdad que dos no acuerdan si uno no quiere. Por eso, encontrar al otro lado disposición y voluntad es también de agradecer».

EH Bildu pide «más ambición»

Bakartxo Ruiz, de EH Bildu, lamentó la «autocomplacencia» de la presidenta navarra, afirmó que «se ha perdido una oportunidad para escuchar algo nuevo en cuanto a visión estratégica», por lo que le pidió «ambición» al plantear medidas.

La portavoz de la coalición soberanista se refería sobre todo a la política fiscal, materia donde persisten las discrepancias a la hora de llegar a un acuerdo presupuestario. En este sentido, señaló que «lo peor que puede suceder» es que el Gobierno de Chivite asuma el marco establecido por la derecha, y advirtió: «Con la deuda disparada y unos fondos europeos que pueden ser pan para hoy y hambre para mañana, podrían llegar recortes si no se apuesta por una fiscalidad que garantice mayor recaudación y justicia social».

Des esta manera, Ruiz marcó la posición de EH Bildu respecto a las cuentas: «Si dependiera de nosotras el presupuesto sería diferente. Tenemos discrepancias importantes en varias cuestiones. En otras, pedimos que actúen con sentido común». Por ejemplo, Ruiz tildó de «incomprensible» que el Ejecutivo navarro actúe con «esa miopía política» respecto a la política lingüística. Por ello, solicitó aprobar un decreto del euskara y acabar con «la anomalía que supone no valorar el euskara como mérito». Tampoco conciben la visión que tienen los partidos del Gobierno respecto al TAV.

Esparza y sus obsesiones

Ha pasado un año en el que todo se ha acelerado en el mundo, pero las posiciones inmovilistas de UPN siguen fijas en el Parlamento. Como en el filme “Atrapado en el tiempo”, la Cámara navarra acogió otro Día de la Marmota durante la intervención del líder de Navarra Suma.

En lugar de la recóndita Punxsutawney (Pensilvania), Esparza describió una Nafarroa casi apocalíptica que «ya no es referente, no avanza, y ha perdido velocidad». Todo ello porque UPN ya no está en el gobierno y «la llave del nuevo la tiene Bildu», formación que Esparza calificó como «antítesis del progreso» y «sinónimo de falta de libertad».

El único cambio en estos últimos ocho años, sostuvo, es el de Chivite por Barkos y en el caso del PSN «algún cambio más», ya que, añadió, ha renunciado a su programa, a sus principios, a sus valores, ha mentido a la sociedad y ha demostrado que no es de fiar, al tiempo que ha creado una «macroestructura para colocar a todos los que tenían que colocar». Tras criticar al «cuatripartito» de antes y al «pentapartito» actual, se presentó como única «alternativa».

 

Nafarroako Gobernuko bazkide «zorrotz baina leialak»

«Chivite va a pasar a la historia por ser presidenta gracias a Bildu»

JAVIER ESPARZA

Navarra Suma

 

«Las cuentas son el pilar de la recuperación. Navarra avanza y lo hace con quienes quieren»

RAMÓN ALZORRIZ

PSN

 

«El autogobierno se demuestra andando, y sin él no andaremos ni mucho ni bien en el mundo que nos viene»

UXUE BARKOS

Geroa Bai

 

«Llegarán recortes si no se apuesta por una fiscalidad que garantice más recaudación»

BAKARTXO RUIZ

EH Bildu

 

«Estando en el Gobierno es fácil caer en visiones triunfalistas, pero esas cifras esconden otras»

MIKEL BUIL

Podemos-Ahal Dugu

 

«Echamos de menos que Chivite no describa la Navarra real»

MARISA DE SIMÓN

Izquierda-Ezkerra