2024 UZT. 31 El Gobierno español declara «ilegales e ilegítimos» los procesos contra Companys Acto en homenaje a Lluís Companys, en octubre de 2020. (David ZORRAKINO I EUROPA PRESS) GARA MADRID El Gobierno español ha reconocido que el president de la Generalitat Lluís Companys, fusilado por el régimen franquista, «padeció persecución por razones políticas e ideológicas», y ha declarado «ilegal e ilegítimo» el consejo de guerra sumarísimo que lo juzgó, así como la sentencia que lo condenó a muerte. A raíz de las peticiones del Govern de ERC, el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática del Ejecutivo ha hecho llegar al Departamento de Justicia catalán una declaración de reconocimiento y reparación personal hacia la figura de Companys, de acuerdo con la cual fue «represaliado» por ser el president de la Generalitat, según informaron ayer ambos Gobiernos. La declaración de reparación del Ejecutivo español considera «ilegítimas y nulas las condenas del consejo de guerra y las sentencias emitidas por estos y otros tribunales contra el presidente» de la Generalitat, hechas hace casi 84 años. De esta manera, y por primera vez, el Estado reconoce de manera oficial que Companys fue «represaliado, condenado y fusilado por ser el máximo representantes de la Generalitat y por su militancia e ideología». En concreto, el texto señala que el president fue condenado por «haber sido abogado de los sindicatos únicos y de la CNT, por haber organizado la Unión de Rabassaires, por haber sido fundador de ERC, por haber proclamado la República el 14 de abril de 1931 y por cargos públicos ejercidos durante la Segunda República, concretamente, por haber ocupado la presidencia de la Generalitat» de Catalunya. Partiendo de ahí, el Ministerio español declara «ilegales e ilegítimos, tanto el Tribunal Regional de Responsabilidad Política de Barcelona como el consejo de guerra sumarísimo» que enjuiciaron a Companys y, del mismo modo, declara «ilegítimas y nulas cualquier condena, sanción o resolución dictada contra Companys» por «razones políticas, ideológicas, de conciencia o creencia religiosa durante la Guerra de España o la dictadura posterior». REPARACIÓNEl Ejecutivo español considera que Lluís Companys tiene «derecho al reconocimiento y a obtener la reparación moral y la recuperación de su memoria personal, familiar y colectiva».