Otro magnífico escenario donde dar la campanada y recuperar el tono perdido

VALLADOLID-ALAVÉS

Después de ganar en estadios que eran de Primera no hace tanto tiempo, como El Sadar o el Benito Villamarín, el Alavés aspira a repetir proeza en otro escenario de similar corte, caso del José Zorrilla. Y ello le vendría de perlas para cortar las malas sensaciones que se han generado en el entorno albiazul tras los malos resultados del equipo y, sobre todo, la pobre imagen dejada en la derrota frente al Mirandés en un Mendizorrotza en el que no acaba de despegar.

La empresa de ganar a domicilio es ardua, pues el Valladolid solo ha perdido un encuentro en su feudo -ante el líder Las Palmas-, además de ceder dos empates frente al Betis y la Ponferradina. Los vallisoletanos llegan al partido, además, subidos a una buena ola que les ha permitido encadenar dos victorias consecutivas tras caer en Iruñea.

Sin embargo, en el vestuario babazorro hay plena confianza en volver a dar la campanada, siempre y cuando el equipo recupere las prestaciones futbolísticas de conjunto serio, disciplinado y efectivo, que ya mostra- se en pasadas jornadas. Regresar a la seguridad defensiva de esos días es otro de los objetivos que se marcan los arabarras como mejor manera de traerse algo positivo de tierras pucelanas.

Para ello habrá cambios en la línea zaguera, con la entrada del recuperado Unai Medina en el lateral derecho, en detrimento de un desdibujado Galán, que fue retirado a la media hora de juego el pasado sábado. También se pueden dar variaciones en la medular, con la incorporación de Manu García ocupando el hueco de un Beobide que tampoco estuvo muy fino frente al Mirandés.

Ion Vélez se queda en Gasteiz

La mayor sorpresa la dio, en cualquier caso, la ausencia de Ion Vélez en la lista de Alberto López por motivos técnicos. El delantero tafallés estaba siendo un hombre indiscutible en el once del técnico guipuzcoano y el que se haya quedado en Gasteiz solo se puede explicar por el hecho de que se le quieran regular esfuerzos. En todo caso, también es cierto que Manu Barreiro, con goles y remates en sus escasos minutos sobre el terreno de juego, estaba pidiendo a gritos una nueva oportunidad. Parece que el ariete gallego podría saltar de inicio hoy.

En la previa, Alberto López advirtió a los suyos del nivel de concentración necesario para no salir vapuleados de Zorrilla. «Es un rival de los muy potentes de la categoría, si no estamos al 100% e incluso un poco más, como en anteriores encuentros frente a equipos de parecido corte, pues nos pasarán por encima. Hay que intentar que mis jugadores estén lo más activos posible», indicó.

El preparador irundarra destacó que sus futbolistas han venido realizando un buen trabajo a lo largo de la semana, «pero también fue así antes del Mirandés y luego pasó lo que pasó». «En ese partido tuvimos unos primeros 20 minutos que no fueron buenos y, en su momento, ya comenté aquellas cosas que no me gustaron, las hemos visto y la plantilla está, más o menos, de acuerdo con mi percepción», desveló.

Alberto López también recordó su pasado blanquivioleta durante tres temporadas. «Hay gente en Valladolid que es casi como familia. Mantengo una relación personal muy buena, pero luego está el tema profesional y la idea es traerse los pun- tos, está clarísimo», aseguró.