Los parlamentarios de EH Bildu Marian Beitialarrangoitia y Oskar Matute han valorado los acuerdos que el PNV ha alcanzado con PSE y PP para aprobar los presupuestos de 2014.
Han rechazado el pacto entre PNV-PSE en torno a las 115 enmiendas parciales porque supone «un apuntalamiento de intereses de partido» y se ha firmado «con la perspectiva puesta en las elecciones municipales».
Según han argumentado, la búsqueda de esa «rentabilidad electoral» explica por qué «solo se detectan necesidades» en localidades donde estas formaciones tienen «perspectivas» de mejorar su representación municipal.
Beitialarrangoitia y Matute han centrado sus críticas en el pacto que ayer presentaron el consejero de Hacienda y Finanzas, Ricardo Gatzagaetxebarria, y parlamentario del PP Antón Damborenea.
Este acuerdo, ha denunciado Matute «cierra la puerta a la posibilidad de construir políticas propias con herramientas propias pensando desde aquí y para los ciudadanos de aquí» y también «cierra la puerta a un sistema educativo propio» vasco.
En cambio, «abre la puerta a más recortes», implica seguir «servilmente los dictados de Madrid y Bruselas» y además «prioriza el pago de la deuda» a las necesidades de las personas, por lo que «castiga a la ciudadanía y la condena a un mayor pérdida de poder adquisitivo y a la precariedad».
Para la coalición, el acuerdo «hace de la sacralización del endeudamiento y el déficit, que son quienes esquilman las posibilidad de desarrollar políticas de mayor protección social, un dogma de fe».
«No es un acuerdo positivo para la ciudadanía porque no resuelve sus problemas diarios, ni tampoco es un acuerdo positivo para la construcción de este país, de una sociedad empoderada, libre y con capacidad de decidir aquello que considera más adecuado», ha sentenciado Matute.
El parlamentario de EH Bildu ha recalcado que la coalición quiere «concitar la mayoría social y sindical que clama por otras políticas» para hacer frente a la «mayoría aritmética» PNV, PSE y PP suman «en torno a los muros de las instituciones».