«Nosotros somos rusos. Estamos recuperando nuestra alma rusa. Los nazis de Kiev no pasarán», ha proclamado Miroslav Rudenko, copresidente del gobierno de la autoproclamada República Popular de Donetsk.

Unas cinco mil personas se han congregado en la plaza de Lenin, corazón de la ciudad, para participar en un acto político y rendir tributo a los millones de soviéticos que perdieron la vida en la contienda.

«Viva Rusia» o «Donbass es Rusia» han sido algunos de los lemas coreados por los asistentes, que portaban tanto la bandera tricolor rusa como otros emblemas de la región.

«Todo está listo para la consulta»

Los activistas prorrusos aseguran tener todo listo para la celebración este domingo de un referéndum. «Todo está listo para la consulta del domingo. Todas las administraciones locales de Donetsk preparan la votación», ha asegurado el presidente de la Comisión Electoral Central de Donetsk, Román Laguin.

Pese al rechazo de Kiev y los países occidentales, Laguin se ha mostrado convencido de que «habrá una gran participación de en torno al 70% en toda la región».

Los prorrusos rechazaron ayer posponer la consulta en la que preguntarán este domingo a los electores si apoyan la independencia de sus territorios. En caso de que los votantes apoyen la independencia, Rudenko aseguró que cinco regiones (Donetsk, Lugansk, Járkov, Odessa y Nikoláyev) formarían un nuevo Estado independiente que se llamaría Novorossia (Nueva Rusia).

El presidente ruso, Vladimir Putin, había pedido el miércoles el aplazamiento del referéndum después de reunirse en el Kremlin con el jefe de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Didier Burkhalter.