Madrid dará asilo político a Edmundo González Urrutia, que llega con salvoconducto de Caracas
Madrid concederá asilo político al candidato presidencial de la oposición venezolana, Edmundo González Urrutia, que se ha exiliado en el Estado español, con salvoconductos proporcionados por el Gobierno venezolano.
El Gobierno español concederá asilo político al candidato presidencial de la oposición venezolana, Edmundo González Urrutia, que se ha exiliado este domingo en el Estado español, adonde ha llegado en un avión militar español con salvoconductos proporcionados por el Gobierno venezolano.
González Urrutia, que impugnó la reelección del presidente Nicolás Maduro el 28 de julio, ha abandonado Venezuela después de ignorar tres citaciones sucesivas para comparecer ante los fiscales, argumentando que su comparecencia podría haberle costado la libertad.
El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, ha confirmado que el opositor «pidió acogerse al derecho de asilo. El Gobierno, naturalmente, (...) se lo concederá».
Albares ha hablado con González Urrutia mientras estaba en el avión militar español que lo trasladaba a Madrid y ha reiterado «la exigencia de que se presenten las actas electorales y que puedan ser verificadas. El Gobierno español insiste en que no reconocerá la victoria de Maduro si no se cumplen estas condiciones.
El pasado sábado, en la reunión de la dirección del PSOE, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, aseguró que «es un héroe al que España no va a abandonar».
El opositor venezolano, que llevaba más de un mes viviendo escondido, estaba sujeto a una orden de arresto desde el 3 de septiembre por no presentarse a tres citaciones del Ministerio Público por desobediencia a las leyes, conspiración, «usurpación de funciones y sabotaje».
«Salvoconducto en interés de la paz»
Por su parte, las autoridades venezolanas han anunciado que habían emitido un salvoconducto al opositor «en interés de la paz y la tranquilidad política del país», según ha indicado la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, quien ha explicado que «tras refugiarse voluntariamente en la Embajada de España en Caracas hace varios días, solicitó ante ese Gobierno la tramitación de asilo político».
Rodríguez ha explicado que los gobiernos de Venezuela y España mantuvieron los «contactos pertinentes» y, «en apego a la legalidad internacional», se le ha concedido al opositor el salvoconducto correspondiente para poder abandonar la sede diplomática y viajar hacia el país europeo.
«Esta conducta reafirma el respeto por el derecho que ha primado en la actuación de la República Bolivariana de Venezuela en la comunidad internacional», ha añadido la vicepresidenta. González Urrutia había aceptado sustituir como candidata a la líder de la oposición María Corina Machado, inhabilitada.
Machado reasume el liderazgo opositor
Con su exilio, Machado vuelve a asumir plenamente el liderazgo opositor, dejando al candidato como una pieza de presión desde el exterior, arropada por la Unión Europea. A su vez, el Gobierno venezolano reduce el nivel de la crisis política al solventar la cuestión de la detención del opositor.
«Que esto quede muy claro a todos: Edmundo luchará desde afuera junto a nuestra diáspora y yo lo seguiré haciendo aquí, junto a ustedes», ha afirmado Machado a través de la red social X.
Por otra parte, el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma, miembro del equipo de Machado, ha insistido en que González actuará como «presidente electo de Venezuela» y esa circunstancia «no varía si el presidente electo cambia de residencia».
Ha afirmado que González comparecerá como «presidente electo» en «los escenarios más relevantes» mientras Machado seguirá «honrando desde dentro su promesa de que esta lucha es hasta el final».
El antiguo líder opositor Juan Guaidó, exiliado en Estados Unidos, ha expresado su apoyo a Machado ahora que Edmundo González «está seguro». Machado «está liderando y vamos a acompañarlos», ha subrayado.
Nicolás Maduro, cuya victoria fue validada por el Tribunal Supremo el 22 de agosto, fue proclamado vencedor con el 52% de los votos por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que no hizo públicas las actas de las mesas electorales, alegando ser la víctima de una acción de piratería informática.
Por su parte, la oposición esgrime unas actas facilitadas por sus escrutadores y que las autoridades electorales consideran falsas, con las que sostiene que González Urrutia obtuvo más del 60% de los votos.
Estados Unidos, la Unión Europea y varios países latinoamericanos no reconocen la reelección de Maduro, al igual que hicieron en la reelección en 2018, tras la que respaldaron como «presidente interino» a Juan Guaidó, una maniobra que acabó fracasando, pero que ayudó a privar a Venezuela de importantes recursos.
Apoyo de la UE
El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha opinado que «es un día triste para la democracia en Venezuela», ha lamentado Borrell, quien ha señalado que González Urrutia ha salido del país debido a «la represión, persecución política y amenazas directas contra su seguridad y libertad».
El jefe de la diplomacia respalda las actas presentadas por la oposición según las cuales «sería el candidato presidencial ganador de las elecciones por una mayoría amplia».
«En una democracia, ningún líder político debe verse forzado a buscar asilo en otro país», ha subrayado Borrrell, que ha exigido a las autoridades venezolanas, en nombre de la UE, «poner fin a la represión, las detenciones arbitrarias y el hostigamiento contra los miembros de la oposición y la sociedad civil, así como liberar a todos los presos políticos».
El ministro de Asuntos Exteriores de Países Bajos, Caspar Veldkamp, ha informado a la Cámara de Representantes de su país de que el líder opositor venezolano estuvo alojado en secreto en la embajada neerlandesa en Caracas durante más de un mes, a petición del propio González Urrutia.