Txema Landa Aizkorbe

¿Quiénes discriminan a quienes?

De forma reiterada se leen, ven y escuchan noticias sobre la discriminación que supone la exigencia o la valoración como mérito del euskara. En ellas se argumenta que no puede ser exigida o reconocida como mérito una lengua, porque discriminaría a aquellas personas que no la conocen. Ahora vamos a ver cual es el motivo por el que determinadas personas no conocen o no tienen un nivel de competencia adecuada en euskara.

Es evidente que el acceso al conocimiento del euskara, a día de hoy, aun no siendo suficiente, está bastante extendido y pudiéramos decir que toda persona interesada puede aprender, ¿entonces por qué hay gente que por su edad pudiera haberlo aprendido o perfeccionado lo suficiente y no lo ha hecho? Cuando se abren las campañas de escolarización madres y padres pueden elegir entre los distintos modelos educativos tanto en euskara como en castellano, con deshonrosas excepciones, para sus hijas e hijos, siendo los padres y madres los que, influenciados por unas y otras informaciones más o menos prejuiciadas, eligen.

¿Cuáles son esas influencias más o menos prejuiciadas? Si me circunscribo a la Comunidad Foral de Navarra, que es lo que mejor conozco, se encontrarían: por un lado, los que disuaden a madres y padres de elegir euskara o modelo D, entre otros, los sindicatos como UGT y CCOO, por citar los más representados, así como partidos como UPN, PSN, PP, Vox y algunos sectores de Contigo Zurekin, además de los medios de comunicación del ámbito unionista. Por otro, quienes animan a madres y padres a dar el paso y matricular a sus hijas e hijos en euskara o modelo D, entre otros los partidos EH Bildu, Geroa Bai, y algunos sectores no unionistas, y sindicatos como LAB o ELA, además de los medios de comunicación más cercanos al soberanismo.

Aquí entra ya la decisión de madres y padres que, una vez conocidas las influencias externas, optan por una u otra opción, y esa decisión llevará a que en el futuro sus hijas e hijos tengan o no conocimiento del euskara.

¿Discriminan las madres y padres a sus hijas e hijos cuando optan por el euskara? No, porque, además de tener un conocimiento correcto del castellano, del inglés, el francés u otras lenguas, tendrán un conocimiento de la lengua y la cultura vasca que, además, les capacitará para tener un conocimiento mucho más profundo de la cultura de la comunidad a la que pertenecen. ¿Discriminan madres y padres a sus hijas e hijos cuando no optan por el euskara? Sí, porque les privan del acceso a una de las lenguas oficiales de la Comunidad Foral de Navarra (aunque esa oficialidad esté constreñida por una ley evidentemente injusta), que les dará acceso a un conocimiento más completo de la realidad de su comunidad, y también les privará de posibilidades laborales en el futuro por una decisión prejuiciada de sus madres y padres, y cuando esto ocurra deberán tener en cuenta que su desconocimiento no es fruto del azar, sino de una decisión familiar que finalmente les perjudica.

En resumen, son las madres y padres quienes, influenciados por los sectores unionistas, deciden no matricular a sus hijas e hijos en euskara o modelo D quienes los discriminan al alejarlos de algo bueno como es el conocimiento de otra lengua y de la cultura que le acompaña, educándolos en la deficiencia.

No terminaré este escrito sin recordar que el hasta hace poco parlamentario de UPN Iñaki Iriarte López publicó un artículo que se titulaba “Derecho a no aprender euskera y no ser castigado”, curioso título para alguien que es profesor de universidad. Olvidó decir el ínclito profesor que la única lengua obligatoria en la Comunidad Foral de Navarra es, por ley, el castellano, del que no pedía derecho a no aprender, ni tampoco el derecho a no aprender otras materias.

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