Como cabía esperar, el encuentro ha dispuesto de un ritmo muy elevado, con infinidad de ocasiones para el cuadro rojillo, al que le ha faltado afinar la puntería, y un adversario muy efectivo, que ha inaugurado el marcador en la primera que ha llegado al área de Rubén Martínez, siendo Diamanka su futbolista más peligroso. Antes del 1-0, los de Jagoba Arrasate se han podido adelantar con un empalme de un protagonista Roberto Torres y un cabezazo fuera de Rober Ibáñez.

Una vez por detrás en el luminoso, Osasuna ha seguido a lo suyo, buscando con criterio la portería rival, pero sin encontrar el premio del gol a su continuado ahínco. De nuevo, el centrocampista de Arre ha enviado un zurdazo al poste, mientras que en el 39 se ha fraguado la mejor ocasión para la escuadra navarra, teniendo que sacar en la línea de gol y con el pie Juan Carlos lo que ya se cantaba como la diana del empate. De manera injusta, el equipo rojillo se ha marchado al descanso con desventaja en el electrónico.

Se esperaba que el equipo mantuviese el mismo ritmo tras el obligado receso, pero Osasuna ha perdido frescura y fluidez, a la par que el Numancia ha ganado en anticipación y, sobre todo, en circulación de balon, mucho más precisa, que ha provocado que los navarros hayan tenido que correr tras él, sin apenas generar ocasiones de peligro.

Apenas un cabezazo fuera de Xisco –uno de los cambios de Arrasate buscando mayor mordiente– a falta de un cuarto de hora ha sido la ocasión más reseñable en un encuentro que poco a poco se iba muriendo y decantando del lado local. Sin embargo, un envío largo –Osasuna ha utilizado esta opción cuando le han apretado las urgencias– ha acabado con un rechazo al borde del área de la defensa soriana, que ha sido recogido por Nacho Vidal para cederlo a Roberto Torres quien, con un giro de tobillo casi inverosímil, ha ejecutado un disparo que ha pegado en el poste y ha entrado en el minuto 94. El de Arre se convierte en el pichichi del equipo, con nueve dianas.

Casi con el pitido final, la euforia en las gradas de los aficionados rojillos –se han calculado unos 2.500 los que se han desplazado hasta la ciudad castellana– se ha desatado al ver cómo su escuadra al menos conseguía sumar un punto que le permite mantenerse en la cabeza de la tabla. Osasuna es ahora tercero, empatado a puntos con el Málaga, segundo, que venció por la mínima y a domicilio al Rayo Majadaonda, y a uno del líder Albacete.