Costoria y Pico Rocoso: avanzando entre boscosas cimas rodeadas por murallas

La única cumbre puntuable de hoy, esto es, el Costoria, tiene la desventaja de que está rodeada de unos pinos que no nos dejan disfrutar de las vistas. Como contrapunto, pasaremos por una escondida cota que os animo a descubrir. Se trata de un olvidado Pico Rocoso que tiene los siguientes atractivos: un perdido sendero entre pinos que os enamorará y, justo en su cumbre, unas gigantes rocas que le dan un carácter más pronunciado a esta cota. Estas últimas, además, nos permiten disfrutar por un momento de unas preciosas vistas al Parque Natural de Valderejo y sus cumbres. Y es que, en esto de las cumbres puntuables, hay que tener en cuenta que «Ni son todas las que están, ni están todas las que son».

Por otra parte, este recorrido está custodiado en todo momento por las paredes del Parque Natural de Valderejo. Da la impresión de que dicho parque constituye una fortaleza rodeada de unas enormes murallas naturales por todo el perímetro. Al sur y al este estaría la Sierra de Artzena y al norte y al oeste la Sierra de Bóveda, respectivamente. Todo un placer el poder admirarlas.

Bosque a través

Desde la fuente del pueblo subiremos dirección oeste por una calle que, en breve, se pone dirección sur y sube haciendo unas «eses». Dicha calle muere en una barrera, donde nace un sendero. Por este sendero continuaremos dirección sur paralelos a una langa. La langa dura bastante; más concretamente, lo que dura una pieza que tenemos a nuestra izquierda. Cuándo se acaba la pieza, nos toca hacer «la del jabalí» bosque a través, siguiendo dirección sur. De esa manera, nos toparemos con una pista principal que atraviesa transversalmente de este a oeste la ladera norte del monte Batxikabo.

Una referencia importante: la pista principal es de tierra, no de hierba. Además, siempre asciende dirección oeste. Esto lo digo porque, si llegáis a alguna pista que es de hierba y, encima, hacia el oeste desciende, lo que tenéis que hacer es ascender por dicha pista de hierba hasta llegar a la pista principal, la de tierra.

Como segunda opción, por si queréis avanzar más tranquilos, desde la misma iglesia del pueblo de Barrio nace la pista principal dirección sur. Así que la podéis coger desde allí y libraros del campo a través. A cada uno lo que le guste.

Volviendo a nuestra ruta, una vez en la pista principal, torcer a la derecha, dirección oeste, y a seguir subiendo. Según avanzáis por ella, pasaréis, primeramente, por al lado de una fuente y, más adelante, un par de vaguadas. Por último, cuando estemos a la altura del Costoria, esto es, en su misma latitud, abandonaremos la pista. Esto ocurrirá en el filo del monte. Aquí nace un sendero dirección norte. Dicho sendero avanza por el filo y, escondidos entre los pinos, llegaremos a esa cumbre tan guapa y escondida, le llamé el Pico Rocoso.

Este difuso, pero precioso sendero baja vertiginosamente por la ladera noreste y muere en una pista herbosa. Seguiremos hacia el norte por dicha pista herbosa. Esta nos deja en otra pista mucho más formada de tierra y piedras. Al mismo tiempo, también nos deja en el mismo collado sur del Costoria. Así que avanzaremos por un nuevo sendero que va por todo el filo para llegar, en breve, a la cima del Costoria (1.032 m), la cual bien merece ser pisada.

Solo nos resta volver sobre sobre nuestros pasos hasta el collado sur. Desde aquí bajaremos dirección este por la pista principal, rodeando así todo el monte Costoria para llegar a su collado norte.

Desde el collado norte se ve el sendero que sube a la cumbre del Carabo. Y un poco más adelante, veremos hacia la izquierda la subida a la ermita de Nuestra Señora de la Mellera y sus impresionantes paredones. Ambas opciones tan recomendables se nos quedaron sin hacer por falta de tiempo, ustedes deciden qué hacer.

Por último, desde el collado norte tomaremos una pista que baja dirección sureste para llegar, sin pérdida, de nuevo a Barrio.