El ciclón ‘Motomami’ de Rosalía recala en el BEC de Barakaldo

La gira mundial de Rosalía, Motomami World Tour 2022, recala hoy en el BEC, donde la artista catalana presentará ante sus fans vascos los temas de su último trabajo, ‘Motomami’, un disco polémico con el que ha querido reivindicarse como la gran artista que es, huyendo de todo tipo de etiquetas.

Cuando a finales del pasado año Rosalía presentaba el primer tema de lo que, a la postre, sería su nuevo disco, algo se removió inmediatamente en las entrañas de la industria musical. La maquinaria estaba en marcha y ya no se podía parar. ¿Qué estaría tramando la artista catalana? ¿Con qué nos sorprendería en esta ocasión, después de tocar el cielo con “El mal querer”? ¿Seguiría por el camino marcado en aquel disco, que ya es historia de la música en castellano?

Poco a poco, y haciendo uso de una inteligente y muy pensada campaña de marketing, se iban descubriendo más detalles del nuevo trabajo y se iba viendo que, lejos de quedarse anclada en su zona de confort, Rosalía apostaba claramente por romper con todo y hacer lo que le daba la gana, pasando olímpicamente de las críticas y dejándose llevar por lo que el corazón le pedía en cada momento, dando muestras de un empoderamiento absoluto y de una independencia creativa envidiable.

Y así, después de varios avances más o menos ilusionantes, dependiendo de la amplitud de miras de quien lo escuchara, un viernes de marzo la espera llegaba a su fin, y veía la luz el disco completo: una bachata por aquí, un reggaetón por allí, un poco de flamenco, una balada… todo tenía cabida en ‘Motomami’, el elepé con el que la catalana daba un puñetazo encima de la mesa y dejaba claro que a ella nadie le va a decir nunca lo que tiene que hacer.

Con el disco ya en la calle, empezaron a salir todos esos y esas defensores y defensoras de “la buena música” para opinar sobre un trabajo sobre el que, realmente, nadie podría opinar desde un enfoque meramente musical, porque no había nada con qué compararlo; ‘Motomami’ era una locura única, una obra de arte desde el punto de vista de la producción, una apuesta arriesgada y muy cara con la que Rosalía se coronaba como la nueva «reina del pop» y, a nivel internacional, se consolidaba como la artista más importante del Estado, y como la gran renovadora de la música actual.

Reivindicaciones

Cuatro años después de aquel ‘El mal querer’, que la encumbró como la gran esperanza de la música en castellano, y tras varios escarceos y colaboraciones posteriores con la música urbana, que le acarrearon las primeras críticas, Rosalía se tomaba con este nuevo trabajo su venganza. Mensajes directos y nada encubiertos en temas como ‘La fama’, donde hace una crítica a la industria musical y lo que ello conlleva («Es mala amante la fama y no va a quererte de verdad es demasiao traicionera, y como ella viene, se va») o ‘Bulerías’, donde se reivindica como la gran cantaora flamenca que siempre ha sido y que sigue siendo, cante lo que cante («Soy igual de cantaora con un chándal de Versace que vestiíta de bailaora»).

La artista también hace una declaración de intenciones en un disco que supone una huida hacia delante de todo tipo de etiquetas o encasillamientos, creando un nuevo estilo basado, precisamente, en la ausencia de cualquier estilo, y en el que mezcla, sin ningún tipo de complejo el pop con el flamenco, el reggaetón, la bachata, el bolero e incluso con algunas pinceladas de jazz. Una apuesta única y, como decía anteriormente, muy cara, ya que Rosalía contó para la gestación de su ‘Motomami’ con la participación de prestigiosos productores como Dylan Wiggins, El Guincho, Frank Dukes, Michael Uzowuru, Noah Goldstein, The Neptunes, Sir Dylan, Sky Rompiendo o Tiny, y con la colaboración de The Weeknd y Tokischa. Pero el esfuerzo y los tres años de espera desde que empezara a crearse este trabajo han tenido su recompensa, y desde que se estrenó ha conseguido situarse en los primeros puestos de las listas de venta, de donde todavía no ha salido.

Motomami World Tour

Pasado este primer terremoto, la ganadora de un Grammy y de ocho Grammy latinos, entre otros muchos galardones, anunciaba su gira mundial, que, de julio a diciembre, la llevará por todo el planeta: desde Almería a California pasando por el Estado francés, Brasil, Chile, República Dominicana, México… y Euskal Herria, ya que Motomami World Tour 2022 también hará parada este miércoles en el BEC de Barakaldo, que a buen seguro, estará a reventar, ya que la artista cuenta con una gran legión de fans por aquí, tal y como se pudo comprobar las veces que ha pasado por Euskal Herria, como cuando fue cabeza de cartel del BBK Live en 2019, en un concierto inolvidable para quien pudo disfrutarlo.

El del BEC será el décimo concierto de esta macrogira y llegará justo después de sendos «dobletes» en el Wizink Center madrileño y en el Palau Sant Jordi de Barcelona, con todas las entradas prácticamente agotadas, algo que está al alcance de muy pocos artistas o bandas incluso internacionales.

Una oportunidad única, por lo tanto, para disfrutar de uno de los mayores espectáculos de la música actual, huyendo de todo tipo de prejuicios.