08 FéV. 2023 - 17:55h Las fiestas de Baiona seguirán siendo de pago El Tribunal Administrativo de Burdeos ha rechazado, en instancia de apelación, el recurso presentado por el socialista Joe Mendes en contra del cobro por entrar al recinto festivo que acordó en 2018 el Ayuntamiento de Baiona. Varias personas hacen cola para comprar su pase antes de entrar al recinto festivo baionarra, en 2018. (Isabelle MIQUELESTORENA) NAIZ El Tribunal Administrativo de Burdeos ha rechazado, en instancia de apelación, el recurso presentado por Joe Mendes (PS) en contra de la decisión del Consistorio de cobrar por el acceso al recinto festivo a personas no empadronadas en Baiona. En su fallo, con fecha de 7 de febrero, la Corte de Burdeos confirma la legalidad de la decisión adoptada por el Ayuntamiento de la capital labortana en 2018. Para el juez del tribunal de apelación no hay indicio de ilegalidad en la decisión municipal de cobrar -entre 8 y 10 euros, según las ediciones- por acceder al recinto festivo que, cabe recordar, queda acotado en parte mediante un sistema de vallado durante el fin de semana. De esta forma, la Corte de Apelación del Tribunal Administrativo de Burdeos se alinea con la decisión ya adoptada por el Tribunal Administrativo de Pau. Tras este fallo, del que se ha hecho eco Mediabask, los no baionarras deberán pagar por disfrutar de los festejos de la capital labortana. Con todo, y tras varios años de polémica, ahora mismo la cuestión del pago no es la que acapara la preocupación de los baionarras. Más bien es la duda sobre cuándo se celebrarán las fiestas de 2024 la que acapara las conversaciones. Ello se debe a la decisión del Gobierno francés de impedir grandes eventos coinciendo con los Juegos Olímpicos de París de ese verano. Los Juegos Olímpicos alteran el calendario festivo El prefecto de Pirineos Atlánticos se refirió durante su reciente visita a Baiona a las implicaciones de esa «limitación olímpica». Preguntado sobre esa cuestión sensible en la capital labortana, Julien Charles aseguró que buscará soluciones junto al alcalde Jean-René Etchegaray, que desde que se conociera el anuncio de París se ha declarado partidario de que se mantengan las fiestas, aunque haya que hacer concesiones de calendario. Hasta ahora se barajaba adelantar los festejos a la última semana de julio, pero Charles no descartó que las Fiestas de Baiona de 2024 tengan lugar incluso «antes de mediados de julio». Una opción que generará debate, seguro, por la proximidad de San Fermin. El propio Etchegaray se encargó de remarcar que habrá que trabajar un calendario que no genere demasiadas interferencias con respecto a festejos como los de Iruñea o Mont-de-Marsan.