03 AVR. 2023 - 13:10h Osakidetza contará con una unidad específica de cuidados paliativos para menores Un nuevo plan de Osakidetza se marca el objetivo de aumentar la calidad de los cuidados paliativos y ampliar su red para que llegue a más pacientes. Concretamente, se creará una unidad para los y las menores que necesiten de estos servicios, para ayudar a que el fin de su vida sea más amable. El viceconsejero de Salud de Lakua, José Luis Quintas, en la presentación del nuevo plan de paliativos. (IREKIA) NAIZ Osakidetza contará con una unidad específica pediátrica de cuidados paliativos que atenderá a estos menores en el proceso final de su vida tanto en los centros hospitalarios como en sus domicilios, y que tendrá al hospital vizcaíno de Cruces como referente. Esta novedad se incluye en el Plan Estratégico de Cuidados Paliativos de Lakua 2023-2027 que ha presentado hoy en Gasteiz el viceconsejero de Salud, José Luis Quintas. Este plan, cuya elaboración ha estado condicionada por la pandemia, refuerza los contenidos del anterior que finalizó en 2020 y mantiene el compromiso de ofrecer a las personas en el final de sus vidas una atención personalizada, digna y de calidad, asociada a planes individualizados. En este sentido, hace especial hincapié en el trato hacia los más pequeños, por lo que se creará una unidad pediátrica que contará como equipo de referencia con la Unidad de Hospitalización a Domicilio Pediátrica del Hospital Universitario de Cruces. Tendrá equipos en las comarcas sanitarias de Araba, Bilbo-Basurto y Donostialdea como referentes asistenciales de paliativos pediátricos de atención hospitalaria y en domicilio. Estarán coordinados siempre con los recursos disponibles en cada territorio, para garantizar un servicio adaptado a las necesidades del paciente y de sus cuidadores. Cobertura poblacional El plan recoge medidas para aumentar la cobertura poblacional, para que los paliativos acaben llegando al menos al 1% de la población, tal y como aconsejan los organismos internacionales. En este momento se alcanza al 55% de ese porcentaje, y lo que se pretende es superar el 70% en 2024 y rebasar el 90% a partir de 2025. Implementar sistemas de coordinación entre profesionales, fomentar su formación, y avanzar en la coordinación con instituciones sociales y servicios sociosanitarios son otras de las metas a desarrollar en esta iniciativa. El viceconsejero ha explicado cómo se llevan a cabo estos cuidados en la CAV, donde el trabajo en red es su principal característica. En la elaboración del plan han participado cerca de medio centenar de profesionales de todas las disciplinas, estamentos y dispositivos que trabajan en cuidados paliativos y una docena de asociaciones de pacientes. En el ámbito domiciliario el ‘circuito Aringarri’ ofrece atención 24 horas al día los 7 días a la semana. En los hospitales la atención está coordinada entre el equipo especialista de la patología base de la persona enferma, y la unidades y equipos de cuidados paliativos, con el fin de apoyar a todos los servicios del hospital en los que ingresen pacientes que requieran esta atención. En cuanto a los pacientes que viven en residencias de mayores, en unidades residenciales sociosanitarias y en centros de discapacidad, la atención debe prestarse de forma coordinada con los servicios sanitarios de la propia residencia y con los del ámbito sanitario y sociosanitario. Esto supone ampliar el alcance y la calidad de los cuidados paliativos a estas personas, de manera que tengan la misma atención paliativa que tendrían si estuvieran en su propia casa. En este sentido, Quintas ha explicado que una de las prioridades es completar la interoperabilidad de los sistemas de información de Osakidetza con los del ámbito asistencial para que la coordinación sea más fácil, al tiempo que ha precisado que en el caso en el que con los medios profesionales de los que disponen las residencias no fuese suficiente sería un equipo de Salud el que se desplazaría hasta el centro, del mismo modo que lo hace hasta los domicilios.