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El pop tiene nombre de mujer



Si la cuádruple sesión del Miramar fue el viernes una plural fiesta en el espectacular marco de la Donostia costera, la cita de anoche en Txillida Leku, con Verde Prato, Anari y Julieta Venegas, rozó lo exquisito. Por los personales recitales de las protagonistas y por el original entorno del museo.

Verde Prato, en Chillida Leku. (Andoni Canellada | Foku)




El cálido viento sur volvió este sábado a poner a prueba a artistas y público en la playa de Ondarreta, donde propusieron sus particularidades creaciones musicales el donostiarra Lucas Jesús Bariri, el nórdico-mexicano Vatocholo, el trío bizkaitarra Lukiek, el catalán Joe Crepúsculo y Amantes del Futuro, del mexicano Ima Felini.


Vatocholo, ikurriña al hombro en Ondarreta. (Idoia Zabaleta | Foku)

Más llevadero y hasta placentero, con leve presencia de una refrescante lluvia, fue el verde ambiente del parque del museo Txillida Leku, junto a cuyos altos árboles se programó un triple recital femenino.


Como sucedió el viernes en los jardines de Miramar, la taquilla del centro artístico colgó el cartel de ‘no hay entradas’ y el encuentro social fue masivo, pero con un aforo bien medido. Nada de agobios festivaleros. Es la filosofía del nuevo encuentro musical Boga Boga y no encajaría con el carácter del lugar.



Calma


La pianista y también pintora Ana Arsuaga (Tolosa, 1994) es relativamente nueva en el mundillo pop, lleva dando la cara en público desde comienzos de década y cuenta con cuatro grabaciones y algunos títulos popularizados en el ámbito del pop independiente. Para la mayoría de asistentes fue la sorpresa de la jornada.


Sola ante el peligro, apoyándose a ratos en el teclado y con un amplio soporte de pregrabados, cantó y bailó sinuosa. De voz amablemente relajada, transmitió calma y naturalidad, incluso cuando tiró de versión del acelerado ‘Zu atrapatu arte’ de Kortatu que reconstruye en clave de lo que ha titulado como ‘Euskal Pop Erradikala’.


Su relajante set list (la revisión del ‘Agurra’ de Lourdes Iriondo, ‘Mutilaren kanta’, ‘Niña soñando’, ‘Neskaren kanta’…) encontró el mejor marco en la serenidad el museo hernaniarra.



Relax vespertino en el museo al aire libre de Hernani. (Andoni Canellada | Foku)

Melancolía


Anari Alberdi acumula docenas de cantos grabados, con los textos publicados incluso en su traducción al castellano: ‘Demoliciones controladas’. Y viene cantando durante largos años en todo tipo de escenarios. Podría sonar a tópico, pero la belleza natural del museo hernaniarra, mientras el sol se despedía, pareció un apropiado marco para la mucha melancolía que acompaña su repertorio.


En directo y con grupo, la cantautora ha solido vestir de guitarrerismo rockero sus arrastradas cadencias vocales. Con la incorporación del violín se subraya la intención de la tensa ceremonia introspectiva de las canciones y la primera parte de su recital de anoche fue horizontalmente tensa, desgranando (sin)sabores vitales: ‘Desnúdame, desdúdame’, ‘Ametsen eraiste neurtua’, ‘Orfidentalak’… Corrió más el aire en pasajes como ‘Aingurua hegodunak’ o ‘Harriak’ y la desnudez acústica de ‘Piromania’ (que su autora presento como «himno emozionala») pareció resumir la personal belleza del repertorio. 



Disfrute


Mucho ha disfrutado la audiencia vasca con el hacer escénico de la mexicana Julieta Venegas, que protagonizó anoche otra salerosa fiesta musical en el mismo espacio en el que el año pasado también encandilo a la audiencia su compatriota Lila Downs.

Con una brava bajista a su lado y rico apoyo instrumental y de pregrabados, ‘Dime la verdad’ y ‘Caminar sola’ (sobre los miedos de una mujer en la calle) abrieron una alegre sesión que se vino arriba cuando la artista charra tiró de acordeón desde ‘Bien o mal’.


Buena comunicadora con alta soltura escénica, Julieta rescató la «antigüita» ‘Ese camino’, que habla de la infancia con una cadencia puramente mex. Cual suave bendición contra el bochorno cayó una leve lluvia mientras la Venegas y grupo encendían a la audiencia con ‘Lento’ o ‘Andar conmigo’ y desgranaban un cruce de influencias tradicionales con esquemas pop actuales que derivaron incluso al rap en la simpática ‘Eres para mí’.


Se lució entrañable la artista en solitario con ‘Despechada mexicana’ y el recital fue un jolgorio en el bailón vals ‘Me voy’, el cuasi ska ‘El presente’ y el coro colectivo final de ‘Limón y sal’.

Traca final

La corta pero intensa singladura del nuevo Boga Boga arriba hoy a puerto final, en la playa de Ondarreta, en la marina jornada donostiarra del segundo día de regatas. Con un plantel de valores muy jóvenes.


Lukiek, en la actuación de este sábado en Ondarreta. (Idoia Zabaleta | Foku

Desde las 15.30 animará la arena la DJ vasco-madrileña Brava, componente del colectivo Dembooty, que propone sonidos «urbanos-pop». Actuará después el cantante navarro Hofe (Igotz Mendez) con los productores Xabier Lafuente y Marcos Galech (4:40). La tercera sesión presenta a los barceloneses J. Martina, grupo de pop electrónico.
Y a las 19.15 clausura las jornadas el trío valenciano Margarita Quebrada, presentados como responsables de unos sonidos «muy actuales e intensos». Unos adjetivos que pueden definir este primer Boga Boga Festibala, excelente iniciativa que tras su brillante estreno tiene visos de futuro.