«Ola de crímenes»

Todavía está muy reciente el rodaje de “Ola de crímenes” en las calles de Bilbo, Portugalete, Getxo, Barakaldo y Galdakao. La realizadora Gracia Querejeta ha elegido estas localizaciones para su octavo largometraje porque el guion es obra de Luis Marías, quien ha preferido ambientarlo en la ciudad en la que ha nacido, que es la que mejor conoce. Se puede decir que la hija de Elías Querejeta es fiel a sus orígenes vascos en lo que a la colaboración con guionistas se refiere, ya que sus primeras películas las escribió con su padre, y en su etapa más reciente ese cometido lo ha venido ejerciendo Santos Mercero, hijo del cineasta lasartearra Antonio Mercero. Por primera vez Gracia Querejeta no ha participado en la escritura del guion, debido a que “Ola de Crímenes” es también el primer encargo que acepta dirigir. Es una producción de Telecinco Cinema, que contará con el habitual respaldo promocional de la cadena televisiva de Paolo Vasile. Toda una novedad en su carrera, después de trabajar en sus inicios para la productora de su padre, y a su muerte pasar a rodar bajo el paraguas de Tornasol, la compañía de Gerardo Herrero.

“Ola de crímenes” no deja de ser una probatura para la cineasta madrileña, que se estrena en el género de la comedia, y ha debido de quedar contenta con el experimento porque ya prepara “Setenta veces siete”, otra comedia igualmente protagonizada por Maribel Verdú. Será la quinta ocasión en que la dirige, toda vez que “Ola de crímenes” es la cuarta, tras “7 mesas de billar francés” (2007), que le valió a la Verdú un Goya; “15 años y un día” (2013) y “Felices 140” (2015). Recordamos que antes había realizado con otras actrices “Una estación de paso” (1992), “El último viaje de Robert Rylands” (1996), “Cuando vuelvas a mi lado” (1999) y “Héctor” (2004). Todas estas películas son dramas familiares, y la relación entre madre e hijo vuelve a estar muy presente en su nueva película, pero con la diferencia de que está vista a través del humor negro.

Curiosamente, el título del guion de Luis Marías no es nada original, habida cuenta de que ya existe una comedia negra de Sam Raimi y los hermanos Coen titulada “Crimewave” (1985), distribuida en su momento con el subtítulo de “Ola de crímenes, ola de risas”. Justo coincide con la década en que Luis Marías empezó a escribir sus guiones para el cine, en un principio para Enrique Urbizu. Casi siempre con una impronta comercial, la misma que le ha ligado profesionalmente a series de televisión de gran audiencia como “Farmacia de guardia” (1994-1995), “Turno de oficio” (1996-1997), “A las 11 en casa” (1998-1999), “Condenados a entenderse” (1999), “Manolito Gafotas” (2004), “Ana y los 7” (2004-2005), “Al filo de la ley” (2005), “Buscando al hombre perfecto” (2008), “Fuera de lugar” (2008), “U.C.O.” (2009) o “Maitena: estados alterados” (2008-2010).

Maribel Verdú encarna en “Ola de crímenes” a la madre de un chico adolescente problemático, papel que recae en Asier Rikarte, que ya fue dirigido por Gracia Querejeta en el segmento “Txintxorro” del largometraje colectivo “Kalebegiak”. El joven mata en un arrebato a su padre, quien tiene los rasgos de Luis Tosar en una breve colaboración especial. La atribulada madre trata por todos los medios de ocultar la muerte de su exmarido, pero la nueva pareja de éste es una abogada metida en asuntos de corrupción que tratará de echarle el muerto a su teórica rival. Para el rol de la mala se ha escogido a la modelo Paula Echeverría, en una atrevida decisión de casting, que estando detrás Tele 5 parece ser un reclamo para los consumidores de telebasura.

El resto del reparto lo completan Raúl Arévalo, como un taxista; Antonio Resines y Raúl Peña, como una pareja de policías; Juana Acosta, como otra abogada; Nora Navas y Miguel Bernardeau.