Febrero en la terraza

Febrero es el mes más corto del año, muy peligroso para los cultivos por lo que le precede su mala reputación. Es el mes en el que el enfriamiento del suelo es mayor. Y esto, aunque los días comienzan a alargarse y el sol remonta en el cielo, pero unas corrientes polares pueden retrasar el calentamiento de la tierra.

Sucede que cuando el frío intenso desaparece en enero, la vegetación todavía dormida puede comenzar a despertarse antes de tiempo. Y si en ese momento aparece una ola especialmente gélida, los daños pueden ser considerables. Se puede comprobar al ver las mimosas en los caseríos y las camelias en flor en algunas calles que con las temperaturas que se han producido en enero se han caído nada más despuntar.

Si queremos tener éxito con una camelia debemos proporcionarle la tierra que les gusta: ácida y nunca calcárea. En el caso de que sea algo calcárea, será necesario aportar al hoyo de plantación tierra de brezo y al pie colocaremos mantillo para conservar el frescor del suelo. A las camelias les gusta la situación semi-sombreada, cuidando siempre que el sol fuerte les dé solamente unas horas al día. La Camelia “Scentuos” es blanca con el envés algo rosáceo y la Camelia “Fragant Pink” es rosada. Las dos proceden de híbridos de las camelias japónica y salvaje, con el valor añadido que son perfumadas. Como su crecimiento es lento, son variedades apropiadas para su cultivo en tiesto en una terraza.

Pensando en la próxima primavera podemos cambiar las plantas de los tiestos de la terraza o del balcón. Los pensamientos que plantamos en su momento ya podemos sacarlos, se ha acabado su estación. En su lugar irán bien fucsias Fuchsia x hybridum, pequeños arbustos, rústicos en clima templado. De flores caídas simples o dobles, en gran cantidad durante el verano, les gusta la semi-sombra y lucen mejor en tiestos colgantes.

Para añadir grafismo y color a la terraza, escogeremos el lino de Nueva Zelanda, Phormium tenax, de follaje persistente con hojas lanceoladas de un rosa fuerte con bordes estriados de color bronce y chocolate. Le van las exposiciones soleadas.