Medio siglo de historia del Renault 5

Renault ha querido celebrar por todo lo alto el 50 aniversario del Renault 5 con una completa exposición en el Rétromobile Auto Show de París, donde se han mostrado las diferentes versiones de este emblemático modelo, así como el prototipo de R5 eléctrico que se fabricará a partir de 2024.

El Renault 5 fue concebido como un coche «polivalente» (dos puertas y portón trasero) y logró seducir a todo tipo de compradores. Llegó a vender casi nueve millones de ejemplares en veinte años, incluyendo a su sucesor, el Supercinco. En 1980 fue el segundo coche más vendido en el mundo y en el mercado francés siguió siendo líder hasta 1983, según datos del fabricante.

Para celebrar este medio siglo de historia, Renault expuso entre los días 16 y 20 de marzo trece modelos históricos del R5, seleccionados de la colección Renault Classic, en la muestra de vehículos antiguos Rétromobile ubicada en el Espacio de Exposiciones Porte de Versailles de París, una de las más reconocidas en Europa.

En el stand de la marca se mostraron desde las versiones clásicas L y TL de 1972 en colores naranja y verde, hasta la lujosa versión Baccara del Supercinco de 1990, pasando por versiones emblemáticas como el Alpine (Copa), el Turbo o incluso un Maxi Turbo de competición.

El director de Renault Classic, Hugues Portron, señaló que «en el stand, los visitantes pueden redescubrir la historia del modelo y tener una pequeña visión del futuro de la marca con el Renault 5 Prototype», el coche eléctrico inspirado en el R5 que la marca espera comercializar en 2024 con la idea de «democratizar» y «poner al alcance de todos» los vehículos eléctricos en Europa.

Así pues, la exposición Rétromobile fue una oportunidad para conocer la fructífera historia de este modelo que se lanzó en 1972 con dos versiones en paralelo, la L, equipada con un motor de 782 c.c. y la TL, con un propulsor de 956 c.c., más adecuada para un uso polivalente.

En aquel año se lanzó también una versión eléctrica, en colaboración con EDF. Se produjo una flota de unos cien ejemplares, con un habitáculo de dos plazas y cuya autonomía era de 60 kilómetros.

Poco tiempo después, en 1975, se lanzó el Renault 5 GTL, que se distinguía por sus bandas de protección lateral de plástico que prolongaban los parachoques, sus elegantes llantas y sus luces de marcha atrás. Para 1978, el coche se equipó con ventanas traseras que se abrían como el 5 TS. Aunque su principal característica era que las relaciones de la caja de cambios eran más largas para reducir el consumo y hacer frente así a la crisis del petróleo de esa década.

Versiones deportivas. Simultáneamente, Renault decidió comenzar a producir versiones deportivas, como el Alpine (Copa), que llegó en 1976 combinando elegancia y deportividad. Basado en el TS y con un motor 1.4 de 93 CV, en el exterior destacaba por su spoiler integrado en el parachoques y perforado para integrar los faros de largo alcance, sus llantas Renault 17 Gordini, así como sus adhesivos A5 en el frontal y en los laterales.

En 1978 se presentó el Renault 5 Turbo, desarrollado específicamente para los rallyes, con carrocería ensanchada y un motor central trasero de la misma cilindrada y turbocompresor que rendía 160 CV de potencia. Pasó por las manos de campeones como Didier Auriol, François Chatriot o Carlos Sainz, entre otros. Y ya en los años 80, Renault desarrolló el Maxi Turbo, un ejemplar único con un motor turbo de 4 cilindros y 370 CV de potencia. El ejemplar mostrado en París pertenecía al piloto francés Erik Comas.

En 1984, el Renault 5 fue sustituido por el Supercinco, que se mantuvo en el mercado hasta el año 1996. Se fabricaron diferentes versiones, como el GT Turbo, el GTX o el Baccara que se mostró en Rétromobile. Se trataba de la versión más lujosa del Supercinco, con asientos y volante de cuero, un interior de dos colores a juego, un pomo del cambio de marchas de cuero negro, moqueta gruesa en el suelo y el maletero, y la famosa bolsa de ropa bajo la bandeja trasera. Los elevalunas eléctricos delanteros y el cierre centralizado a distancia eran equipamientos de serie.

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