09 JUIL. 2023 PANORAMIKA Sobre lo auténtico Obra sin título de Taxio Arganaz -acrílico y esprai sobre papel 200 x 150 cm-, incluida en la exposición “Mendia eta gaua” del pintor navarro, que se puede ver en la galería Carreras Múgica de Bilbo. Iker Fidalgo En los tiempos en los que los avances tecnológicos parecen estar abriendo nuevos caminos para sustituir las mentes creadoras, quizás conviene revisar aquellos espacios en donde la práctica artística, tal y como la conocemos, aún permanece. De todas maneras, es habitual que cualquier nueva tecnología que surja sea sistemáticamente puesta en el punto de mira. La fotografía que parecía que iba a desbancar a la pintura acabó encontrando su propio lugar, igual que la explosión del mundo digital se instauró en nuestros dispositivos y en nuestra cotidianidad de una manera mucho más natural que lo que se podía prever en sus inicios. Lo auténtico es un término constantemente asociado al arte contemporáneo. En el contexto del mercado hablaremos de la originalidad de la obra que se subasta y se colecciona, mientras que en la producción objetual hablaremos de copias únicas o, en su defecto, series numeradas y, en consecuencia, limitadas. Pero en otra de sus acepciones, la autenticidad tiene que ver con la coherencia. Es una condición cercana a la honestidad y sirve para describir una actitud o un modo de hacer. Es por eso que lo auténtico en el arte también puede entenderse como una producción de obra que se mantiene fiel a sí misma. Aquella que es concebida como fruto de un proceso de trabajo y que llega a nuestra mirada mostrando la madurez que ha ido ganando durante el camino recorrido, y es precisamente en este aspecto donde se enmarca nuestra reseña de hoy. El pasado 18 de mayo, la galería Carreras Múgica de Bilbo inauguró una exposición a cargo del pintor navarro Taxio Ardanaz (Iruñea, 1978). “Mendia eta gaua” es el título de este proyecto que supone la segunda exposición individual del artista en la galería tras “Las condiciones necesarias” realizada en 2017. Ardanaz presenta una serie de piezas finalizadas en 2022 y 2023, que emergen desde una práctica pictórica contundente y decidida. El acrílico se combina con el esprai para volcarse sobre un soporte tan noble como el papel, pues deja entrever el peso de los materiales y la acción de ellos sobre sus fibras. Una paleta de colores vívidos juega con centelleos, degradados y formas que desde la abstracción tienden, a veces, a formar figuras reconocibles. Las obras, en su mayoría de formato grande, proponen un recorrido de gran riqueza cromática en el que vemos gestos, trazos y tendencias que se repiten y relacionan. Entre los cuadros encontramos varias obras realizadas con chapa de formica perforada y pintada con spray. Un juego de volúmenes y relieves que nos lleva hacia un juego de posiciones entre capas de color y la relación con el fondo y la forma. La muestra podrá visitarse hasta finales de este mes y es una oportunidad para conocer de cerca la etapa más reciente de uno de los pintores contemporáneos más interesantes de su generación.