20 OCT. 2015 MONTAÑA La expedición WOPeak holla la cima del Chamlang Albarto Iñurrategi, Juan Vallejo y Mikel Zabalza lograron su objetivo pese a lasadversas condiciones climatológicas. Esta mañana llegarán al campo base. GARA NEPAL A las 8.50 de la mañana, hora de Euskal Herria (12:50 en Nepal), la cordada de Iñurrategi, Vallejo y Zabalza logró alcanzar la cima del Chamlang (7.319 metros). Los alpinistas ascendieron por la cara Oeste de la montaña, cuya mayor dificultad la presentaba una afilada arista. La vía que siguieron fue abierta por una expedición japonesa en 1986, en estilo pesado –con 17 alpinistas y 4.000 metros de cuerdas–, y es la única ascensión al Chamlang por ese lugar hasta la fecha. La montaña solo contaba hasta ayer con 5 ascensiones. La expedición WOPeak se ha desarrollado en estilo alpino, sin cuerdas fijas y con el material mínimo de escalada y vivaqueo que cabía en las tres mochilas de los montañeros. La ascensión comenzó a las 8 de la mañana, después de esperar durante 3 horas a que el fuerte viento amainase algo. El parte de tiempo que había llegado horas antes desaconsejaba el asalto a la cumbre debido, precisamente, a la intensidad del viento y el frío en altura. Sin embargo, una corta comunicación por walkie con Juanjo Otazu, cámara de la expedición, que esperaba noticias en el campo base (5.500 m.) transmitía el logro «Juanjo, hemos hecho cima, los últimos 100 metros lo hemos pasado mal. Hace muchísimo frío, vamos a sacar una foto y vamos para abajo» le comunicaron desde la cima. Descenso tras una noche en vivac Tras descender a la cota de 6.600 metros, los montañeros descansaron en una tienda que montaron para vivaquear esta pasada noche antes de descender hoy al campo base. Ya desde la tienda, Iñurrategi volvió a contactar con Otazu para comunicarle que estaban bien, que el viento se había calmado un poco y que esperan llegar al campo a media mañana. El logro de esta cima se produjo tras un proceso de aclimatación que comenzó con el establecimiento del campo base el 27 de setiembre. En las siguientes semanas los alpinistas exploraron la montaña, de la que había poca información. La idea inicial, antes de llegar a Nepal, era atacar la cara Norte pero tras la exploración llevada a cabo esta opción fue descartada en el estilo alpino. Según Vallejo, la opción de escalar la arista Oeste era la que ofrecía más posibilidades de éxito y hacerlo además en estilo alpino colmaba las aspiraciones de la expedición».