12 NOV. 2015 CRISIS DE LOS REFUGIADOS La UE y África buscan una acción común ante el drama migratorio La Unión Europea, desbordada por el flujo de refugiados, va a pedir a África que acepte más devoluciones de sus migrantes en situación irregular y se comprometa a aplicar políticas efectivas de repatriación, a cambio de una mayor ayuda al desarrollo. La Unión Africana pide a Europa que «no sea una fortaleza» y se abra a la inmigración regulada. GARA La valeta «Debemos unirnos, tanto los países de origen como los de destino», declaró ayer el primer ministro maltés, Joseph Muscat, en la apertura de la cumbre de dos días que reúne en La Valeta (Malta) a los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) y África para intentar afrontar de manera conjunta la llegada al continente europeo de inmigrantes «sin papeles» por el Mediterráneo central, que se suman al incesante flujo de refugiados que escapan de la guerra y han provocado un crisis sin precedentes que Europa es incapaz de atajar. Los Veintiocho y líderes de unos 30 países africanos acordaron abordar conjuntamente las «causas profundas» que impulsan a tantos africanos a dejar sus países y la forma que Bruselas tiene de afrontar esta crisis es ofreciendo a África –como está haciendo con Turquía– más dinero en forma de ayuda financiera y logística al desarrollo a cambio de que se comprometa a aceptar más retornos de sus ciudadanos que han emigrado a Europa de forma irregular. Ambas partes lograron un principio de acuerdo a nivel técnico sobre la declaración política y el plan de acción de cinco puntos –causas de la migración, la migración regulada, la prevención del tráfico de migrantes, el apoyo a los desplazados y el retorno de los que no tengan derecho a protección internacional– que sellarán hoy. Hasta 25 países de la UE han comunicado ya a Bruselas su intención de contribuir al fondo fiduciario de emergencia de 1.800 millones de euros para África, a cambio de que los socios africanos se comprometan a aplicar políticas efectivas de repatriación de inmigrantes «sin papeles», una medida que la UE quiere acelerar. «El retorno voluntario es siempre preferible, pero cuando no sea posible el no voluntario es un prerrequisito para una política migratoria bien gestionada», subrayó en su bienvenida el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, quien el martes recordó que «este año, según las estadísticas más recientes, 1,2 millones de personas entraron ilegalmente en la UE, principalmente por mar». Aunque la atención y la tensión se ha desplazado del Mediterráneo central a la ruta de los Balcanes, el flujo procedente de África no ha cesado. Y los europeos pretenden disuadir a los que no consideran refugiados, a diferencia de los eritreos. Los países africanos están molestos por la diferencia de trato a sus ciudadanos y piden a los europeos que no cierren totalmente sus puertas y se desarrollen «canales de migración legal» (turismo, estudios, trabajo), pero los líderes europeos, temerosos de sus opiniones públicas, son muy cautelosos al respecto. La presidenta de la Unión Afriana (UA), Nkosazana Dlamini-Zuma, abogó porque la UE «no sea una fortalezas sino que se abra a la inmigración legal». La UE quiere también ayudar ante las migraciones internas, sobre todo a países que acogen a refugiados, como Sudán, Camerún o Etiopía. «Las migraciones africanas se producen sobre todo en África: la emigración económica hacia Europa es bastante débil», constató un respon- sable africano, que añadió que «el desempleo de los jóvenes es la mayor frustración y la mayor amenaza política y social». Mueren 18 refugiados en un nuevo naufragio Al menos 18 refugiados, entre ellos siete niños, murieron ahogados ayer al hundirse la barca en la que se dirigían a la isla griega de Lesbos desde la costa turca. Los equipos de rescate recuperaron 18 cadáveres y pudieron salvar a 27 personas. Los refugiados, que podrían ser sirios o iraquíes, se hicieron a la mar en una barca de madera en Ayvacik para cruzar el brazo de mar de unos 10 kilómetros que separa Turquía de Lesbos. Decidieron continuar viaje tras notar que la barca comenzó a hacer agua, pero naufragaron cuando intentaron volver al ver que el bote se hundía.GARA