11 JAN. 2016 BALONCESTO GBC ya ha alcanzado a Estudiantes Los de Fisac, con Llompart al mando, llevaron la iniciativa, y supieron guardar la calma ante los arreones liderados por Laprovitola. Arnaitz GORRITI ESTUDIANTES 85 RETABET.ES GBC 90 Según consta en la clasificación en la página web acb.com, Retabet.es Gipuzkoa Basket mantiene su condición de colista, pero su número de victorias ya es igual al de un Estudiantes al que derrotaban ayer en el Barclaycard Center. Y con la mano que le echaba Bilbao Basket tras su victoria en Zaragoza, incluso el puesto 16 se ve más cerca. Una de las ventajas que puede tener Gipuzkoa Basket respecto a Estudiantes es la de disponer de una actitud más humilde. La escuadra del Ramiro parece vivir en una esquizorenia constante de continente de altos vuelos con un contenido mucho más limitado, mientras que los donostiarras parecen ser más conscientes del suelo que pisan. En ese sentido, precisamente fue la sensatez en el juego lo que daba la iniciativa a los de Porfi Fisac, con Llompart y Andrés Rico dirigiendo y guardando la calma en los peores momentos. Mientras, los madrileños se perdían en un concurso de triples lanzados sin ton ni son –10 de 33–, entregados a lo que saliera de las manos de Nacho Martín o los arreones que provocaba el base argentino Nicolás Laprovitola, recién fichado de Lietuvos Rytas. El público del Barclaycard Center no comprendía cómo Gipuzkoa Basket no solo marchaba por delante en el primer cuarto, sino que al arrancar el segundo establecía un parcial de 1-12, para pasar del 15-18 al 16-30. Diego Ocampo, entre el runrún y los pitos de la gente, pedía tiempo muerto. Doblas, Marcus Landry o Wear vivían con comodidad, mientras que hombres de la incuestionable talla de Juancho Hernangómez o Xavi Rey lucían apocados, lejos de su habitual brega al rebote. Vrkic –superando a Vicedo o a Darío Brizuela, en un extraño quinteto con Salgado, Jaime Fernández y el propio donostiarra en la línea exterior–, vivía sus mejores minutos desde que debutara en la ACB, y solo unos minutos de locura estudiantil apretaban el marcador, 32-36, poco antes del descanso, gracias al regreso de Laprovitola. Al receso, eso sí, los de Fisac volvían a estirar el acordeón, ante un adversario desquiciado por las decisiones arbitrales, llegándose a la media parte con un cómodo 35-45. Jordi Grimau acepta el reto La vida se le complicó muchísimo a Gipuzkoa Basket en el tercer período. David Doblas volvió a autoexpulsarse –en rigor, no, pero después de cometer su cuarta falta estuvo muy cerca de caer eliminado por una técnica, y Fisac se lo quitó de en medio dando entrada a Agbelese y sin sacarlo ya más–, aunque pudo haber sido peor, ya que los de Fisac se mantuvieron siempre en cabeza en el marcador. Con Agbelese sumando minutos de calidad, GBC aguantaba los tirones de Laprovitola y Nacho Martín, aunque llegaba a empatar el marcador a 51. No obstante, de la mano de Marcus Landry y Jordi Grimau, los guipuzcoanos volvían a escaparse, llegando a ponerse con 14 puntos de ventaja, 63-77, ya mediado el último período. En esos minutos, en los que Javi Salgado fue un involuntario aliado de los donostiarras, parecía que la victoria estaba en el bolsillo visitante. A la desesperada, Juancho Hernangómez recuperó sus constantes después de un mal partido y volvió a dar otro arreón a Estudiantes. No obstante, ahí estaba la dirección de Llompart para dar la mejor opción al ataque donostiarra, y ahí estaba también Jordi Grimau, que con nueve puntos en los últimos diez minutos, supo apuntillar a los del Ramiro. Con paciencia, los de Fisac aguantaron las embestidas locales, y los han alcanzado en la clasificación, pese a seguir últimos. Porfi Fisac: «No nos entierren todavía» «Una derrota hubiera sido difícil de asumir», confesaba Porfi Fisac, quien además destacaba la «constancia» de los suyos ante los achuchones rivales. «Es una victoria importante que nos hace decir que no estamos muertos y que no nos entierren», añadía. «Hemos sido muy sobrios y muy sólidos, jugando siempre con la misma constancia a pesar del empuje que ellos han tenido en momentos determinados. Pero nosotros hemos sido un grupo que sabía en todo momento lo que tenía que hacer, a quién y cómo le tenía que llegar el balón, y eso es lo que nos ha dado la victoria», admitía el técnico segoviano. Cuestionado por el desempeño de los dos últimos fichajes de GBC, Fisac reconocía sus méritos, pero subrayaba que «la clave ha estado en que nuestro núcleo duro ha estado a gran nivel, que es quien nos sacará las castañas del fuego».A. G.