La brújula no miente. El fútbol femenino sigue creciendo en Europa hasta situarse en el 1.208.558 de jugadoras federadas en la última temporada. Pero el avance es desigual y, aunque en números absolutos, la jerarquía continental se mantiene al Norte, procentualmente la progresión está claramente encabezada por los países del Este, según se desprende de los datos recogidos en el último informe de la UEFA.

El podio, a este respecto, lo conforman Eslovaquia, Kazajistán y Rumanía. En los últimos seis años, el número de futbolistas federadas ha crecido en un 1.009% en Eslovaquia, un 900% en Kazajistán –que además presenta uno de los mayores porcentajes de jugadoras profesionales– y un 688% en Rumanía. Les siguen Azerbaiyán, con un aumento del 400%, y el 379% de Serbia, y no andan demasiado lejos Hungría, Montenegro o Bielorrusia. Lamentablemente, en media docena de las 54 federaciones analizadas en el estudio, la tendencia ha ido a la inversa. Sobre todo en Turquía, donde el número de federadas se ha reducido en tres cuartas partes, pero también en Chequia, Rusia, Croacia, San Marino y Suiza.

No es el único punto en el que el Este marca tendencia. Tres nuevas Ligas se han puesto en marcha y, junto a la griega, han echado a rodar competiciones en Georgia y Armenia.

Las cifras tampoco encierran demasiados misterios: con un punto de partida bajísimo, de cero en algunos casos, las del Este son federaciones con un camino mucho más largo que recorrer. Así que, quizá, sea más remarcable el hecho de que en los países con mayor tradición, el fútbol femenino tampoco deja de crecer.

Apuntando al Ártico

En número y en porcentaje de practicantes, la brújula también es clara. Y en este caso se dirige claramente al Norte. Alemania sigue siendo la federación con mayor número de fichas (258.830), seguida de Suecia (167.949), Holanda (137.525) y Noruega (106.696). Porcentualmente, hay que acercarse más al Ártico. Islas Feroe tiene el mayor porcentaje de mujeres fereradas (1.405, con una población de 48.456 habitantes), por delante de Noruega e Islandia.

Alemania también encabeza el ránking de mujeres en el arbitraje, por delante de Italia e Inglaterra, así como el de espectadores, en el que prácticamente dobla al de sus compañeros de «podio», Francia e Inglaterra. Precisamente es esta última, la Federación inglesa, la que más dinero ha destinado al fútbol femenino en la última temporada, 15 millones de euros.