Amaia Ereñaga
Periodista
IKUSMIRA

Para criar a un niño/a hace falta una tribu

El conocido proverbio africano del título viene a cuento del revuelo montado en las redes sociales y por algunos medios (bajos, más bien, por sus instintos) de (anti)comunicación a raíz del breve extracto dado a conocer por Catalunya Radio de una entrevista con la diputada del CUP Anna Gabriel que emitirán próximamente. Básicamente, en lo que ha trascendido, Anna Gabriel critica la figura de la familia tradicional, por «conservadora y poco enriquecedora», y en lo personal dice que estaría a favor de «tener hijos en común y en colectivo (...) que fueran educados por la tribu». De ahí a titular «Me gustaría tener hijos con muchos hombres en una tribu» (“Mediterráneo Digital”) o «‘La puta y mal follada’ de las CUP dice que los hijos deben criarse en tribus» (“Periodista Digital”, ejem. El ejem es por lo de periodista, no por digital) hay un trecho.

Anna Gabriel ha provocado urticaria al tocar uno de los puntos de flotación de la derechona: horror y pavor, no solo cuestiona la indisolubilidad de España sino también de la sacrosanta familia. Pero lo que las escandalizadas reacciones evidencian es, sobre todo, una ignorancia supina o un aferrarse a una norma que dicta que solo existe un tipo «bueno» de modelo familiar. Lo sentimos, la familia nuclear no es el único modelo –históricamente y en diferentes culturas se han dado distintos conceptos de familia, sociedad y linaje–, ni tampoco es algo antiguo –se lo «inventaron» con la industrialización– y su futuro es incierto –varía con los cambios sociales–. Un poco más de ser tribu nos vendría bien a todos.