10 JUIN 2016 INICIO DE CAMPAÑA ELECTORAL Arrancan unas elecciones con aires de cambio... para otoño en la CAV Las elecciones del 26, dibujadas como una segunda vuelta de las de diciembre, aparecen también como preámbulo de unas autonómicas de otoño en la CAV donde pueda haber fuertes cambios. Dernière mise à jour : 10 JUIN 2016 - 00:22h Iñaki IRIONDO Por fin ha arrancado oficialmente la campaña para las elecciones a Cortes Generales, una campaña que llevamos arrastrando prácticamente desde el 21 de diciembre del pasado año, y de forma más intensa desde que el 2 de mayo se confirmó que no habría nuevo gobierno. La mayoría de las encuesta anuncian un enorme terremoto en el ámbito sociológico de la izquierda, al caer el PSOE al tercer puesto, siendo superado tanto en votos como en escaños por la coalición Unidos Podemos y sus confluencias. Pero esta convulsión sísmica no supone que vaya a producirse un verdadero cambio en profundidad en el Estado español (que tanto parece desearse desde Euskal Herria). Todo apunta a que vuelva a gobernar el PP, que ganará de nuevo en el Congreso y estará cerca de la mayoría absoluta otra vez en el Senado. La decisión del PSOE de no gobernar con Podemos tras las elecciones de diciembre, porque entre otras cosas suponía buscar la anuencia del independentismo catalán, lleva la política española a un callejón sin salida. O gobierna el PP o no hay gobierno. Porque si los sectores verdaderamente dominantes en el partido que aparenta liderar Pedro Sánchez no permitieron siquiera ensayar la búsqueda de un acuerdo progresista en enero, mucho menos van a apoyar ahora que Pablo Iglesias sea el próximo inquilino de la Moncloa si finalmente Unidos Podemos se confirma como segunda fuerza en el Congreso. Y conste que desde Euskal Herria no faltan ganas de echar al PP del Gobierno. PNV, EH Bildu y Geroa Bai ya han dejado claro que apoyarían casi cualquier operación que tuviera ese objetivo final. Pese a todo, en esta campaña oiremos hablar mucho de un cambio que al final se convertirá en una frustración si se mira más a las matemáticas que a las bases profundas de la política. ¿Hay matemáticamente posibilidades de formar un gobierno de cambio a la izquierda del PP? En el Congreso sí y en el Senado no, y esta Cámara es decisiva para las reformas de la Constitución. ¿Hay posibilidades políticas de un gobierno que corrija las instrucciones que llegan desde la UE y Alemania sobre cómo operar en materia económica y que afronte con decisión la cuestión del derecho a decidir de las naciones? Sobre lo primero se puede admitir el beneficio de la duda; sobre lo segundo, pregunten al PSOE de Andalucía, Extremadura o las dos Castillas. Dijo ayer en el arranque de campaña Patxi López que se abre «una nueva oportunidad para que, esta vez sí, haya un cambio de gobierno. Y lo habrá porque no nos vamos a dejar engañar por el espectáculo de los platós de televisión, ni por las encuestas intencionadas, ni por el ruido con el que algunos quieren taparlo todo. Vamos a ganar porque sabemos lo que queremos». El drama del PSOE es que, precisamente, nadie sabe qué es finalmente lo que quiere. Y, aunque es difícil de creer, el CIS anuncia que el propio Patxi López puede quedarse sin escaño. ¡El PSOE sin diputado por Bizkaia, cuna histórica del partido! Entre tanto, el Mariano Rajoy de los recortes, de la corrupción, de la caja B y de tantas y tantas mentiras está tranquilo con su campaña de canto a la moderación frente a la amenaza bolivariano-comunista. Y en frente, sin rehuir la polarización de la campaña con el PP, un Unidos Podemos que no duda en cambiar sus principios de un día para otro, en aras de la eficacia electoral, se declara de pronto socialdemócrata. Pero si en el Estado español no hay correlación de fuerzas para un cambio, en Euskal Herria sí. Nafarroa ya lo demostró. Y ahora los números que ofrece la encuesta del Gobierno de Lakua para las autonómicas de otoño demuestran que también puede haber mimbres en el Parlamento autonómico. El sondeo indica que el PNV volvería a ganar, pero esta vez con 24 escaños. Le seguirían EH Bildu, con 17, y Unidos Podemos, con otros tantos. El PSE se hundiría a los 9, el PP a los 7 y Ciudadanos entraría en la Cámara con un representante por Araba. Con esos resultados, la suma PNV-PSE no da para gobernar. Iñigo Urkullu necesitaría el apoyo del PP para la investidura primero y para gobernar, después. Eso, en sí mismo, ya sería un cambio. Con esos resultados, a EH Bildu le cabría la posibilidad de buscar la suma con Unidos Podemos, pero también la de forzar al PNV a un acuerdo de gobierno con un fuerte contenido soberanista y social. Ambas fórmulas son también un cambio de paradigma sobre lo conocido. Pero lo que vaya a pasar en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa en otoño va a depender mucho de lo que ocurra primero en las urnas este 26 de junio. Y no serán pocos y pocas quienes votarán pensando que son una segunda oportunidad de corregir lo que no les gustó del 20 de diciembre y la posibilidad también de marcar rumbo de lo que quieren que sea el futuro en el Parlamento de Gasteiz. El PP volverá a ganar en el Estado español El PP volverá a ganar las elecciones en el Estado español, según la encuesta hecha pública ayer por el CIS, que anuncia también un vuelco en el ámbito sociológico de la izquierda, puesto que Unidos Podemos y sus confluencias sobrepasarían de forma nítida al PSOE, tanto en votos como en escaños. El partido de Mariano Rajoy sería el más votado, aunque perdería tanto electores como algunos escaños, pasando de 123 escaños actuales a 118-121. Como ya le ocurriera en el 20 de diciembre, tampoco una coalición con Ciudadanos (que tenía 40 y le auguran 38-38) le daría la mayoría absoluta para gobernar. En segundo lugar, según el CIS, se sitúa Unidos Podemos y sus convergencias, que suman el 25,6% del voto y entre 88 y 92 escaños. Todo un revés para el PSOE, que, con una bajada del 0,8% del voto, caería de los 90 diputados actuales a entre 78-80 Coalición Canaria quedaría fuera del Congreso.I.I. Podemos e IU suman en Euskal Herria Las dos encuestas que se hicieron públicas ayer –la del Gobierno de Lakua y la del CIS del Ejecutivo español– muestran que la coalición de Podemos e Izquierda Unida suma en Euskal Herria y gana dos escaños: uno en Araba y otro en Bizkaia. En el caso alavés los dos sondeos coinciden en que Unidos Podemos lograría un segundo diputado a costa del PSE. Sin embargo, discrepan en quién sufriría el mordisco en Bizkaia. Según el Sociómetro autonómico sería el PNV, pero el CIS prevé que quien perdería el escaño sería Patxi López. También hay otro punto de discrepancia entre la encuesta autonómica y la estatal. Según la primera, EH Bildu obtendría los mismos dos escaños que ahora, mientras que el CIS retrata tres, de los que dos se obtendrían en Gipuzkoa. De hecho, según la intención directa de voto del Sociómetro, la coalición independentista es la primera fuerza en este territorio. Con las cosas así y las dos encuestas en la mano Unidos Podemos sumaría 9 escaños en Euskal Herria y sería la coalición más votada y con más diputados, el PNV tendría 5, PP-UPN 4, EH Bildu 2-3 y PSOE 3-2.I.I. Un cambio profundoen el Estado españoles muy improbable. No hay correlación de fuerzas. Sin embargo, en Euskal Herria sí la hay. Se vio hace unaño en Nafarroa y será posible en otoñoen la CAV. TRES para EH Bildu La encuesta del CIS pronostica tres escaños para EH Bildu, al darle un segundo diputado en Gipuzkoa a sumar al del Bizkaia. El Sociómetro de Lakua le mantiene los dos actuales, porque pese a ser la fuerza con más intención de voto directo en Gipuzkoa del sondeo, tras la cocina le superan Unidos Podemos y el PNV. LÓPEZ, SIN ESCAñO El CIS marca un hecho histórico: la pérdida del PSOE de toda representación tanto en Araba como en Bizkaia. El partido que ganó en 2008 las elecciones a Cortes en la CAV quedaría representado solo por Odón Elorza, mientras Patxi López, presidente del Congreso, se quedaría sin escaño. Según el Sociómetro, no es probable.