La derecha vuelve a ganar al juego de tronos y con votos «en B»

La derecha vuelve a ganar al juego de tronos en el Congreso. En enero cedió la presidencia pero se guardó la mayoría en la Mesa. Ahora tiene presidencia, mayoría y apoyos «en B».

Esta vez lo han hecho sin ni siquiera disimular y además con pactos fuera de la contabilidad oficial. El PP preside el Congreso de la mano de Ana Pastor y la derecha tiene mayoría absoluta en la Mesa cuando no llega a la mitad de los diputados. En la anterior y fallida legislatura, el PP se avino a ceder la presidencia al PSOE, pero se garantizó una mayoría junto a Ciudadanos para cuestiones sensibles. Ahora han ido al copo y lo han hecho además con la inestimable ayuda de diez votos que nadie sabe de dónde han salido. Las miradas se fijan en CDC y en el PNV, pero ambos lo niegan. En el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, los de Rajoy han cedido un puesto a la jeltzale María Eugenia Iparragirre. En enero lo hizo el PSOE.

Entre tanto, las llamadas fuerzas de izquierdas del Estado –en concreto PSOE y Unidos Podemos– siguen empeñadas en anularse mutuamente, con estrategias de regate corto. El partido de Pablo Iglesias propuso al PSOE un pacto que tenía trampa pero ni eso consiguieron.

El sistema de elección de presidencia se basa en que si ninguno de los candidatos tiene mayoría absoluta en una primera votación se vuelve a elegir entre los dos más votados. Podemos propuso al PSOE apoyar mutuamente al candidato de ambos que tuviera más papeletas en la primera vuelta, sumar fuerzas con otros y ganar a Pastor. La trampa estaba en que Unidos Podemos esperaba poder obtener a la primera el apoyo de ERC y algún otro grupo para superar al PSOE, y que fuera su candidato, Xavier Domènech, el que pasara a la segunda vuelta. Pero también eso lo hicieron mal, porque nadie entró a la jugada.

Al final Ana Pastor obtuvo 169 votos, Patxi López 85, Xavier Domènech 71 y Francesc Homs 8. En la segunda votación Pastor tuvo los mismos apoyos de PP y Ciudadanos y Patxi López sumó los de PSOE y Unidos Podemos.

Y así, Ana Pastor, la ministra de Aznar, la amiga de Rajoy, la de los trenes Albia y los escándalos en Adif, se hizo con la presidencia del Congreso. PP y Ciudadanos dominan cinco de los nueve puestos de la Mesa.

Diez votos oscuros

La sorpresa llegó en la elección de las vicepresidencias. Las cuatro se eligen en una única votación por lo que el pacto de PP con Cs exigía una división de voto, pero lo que en realidad hubo fue una multiplicación. Por arte de magia los 169 votos de ambos partidos se convirtieron en 179, (Ignacio Prendes, de Ciudadanos, tuvo 96 y Rosa Romero, del PP, 83) y los 25 votos en blanco se quedaron en 14 blancos y un nulo.

Las miradas, inmediatamente, se volvieron hacia los catalanes de CDC, a los que les urge la generosa interpretación del Reglamento para obtener grupo propio. Homs negó cualquier préstamo en un desmentido cada vez menos convincente. Fuera de micrófono CDC admite que cinco de sus ocho diputados apoyaron el pacto PP-Cs. Pero aún así las cuentas no dan. Se puede suponer que también CC sumó su escaño. Quedan cuatro. Apuntan al PNV. Este partido lo niega. Las otras opciones son ERC o EH Bildu. Todos dicen que votaron en blanco. El lector o lectora interpretará.

Mesa del Senado

En el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, el partido de Rajoy cedió votos para que el PNV, con apenas 5 senadores, obtuviera la secretaría tercera de la Mesa. En enero ya ocurrió algo similar, pero entonces la cesión del puesto fue del PSOE.

El PP controla cuatro de los siete puestos de la Mesa del Senado y junto con Ciudadanos tiene la mayoría absoluta también en la del Congreso. Legislativos controlados.

Rajoy quiere formar gobierno a primeros de agosto

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, aseguró ayer que quiere «gobernar» y se mostró dispuesto a hacerlo en minoría siempre que pueda atender unas «obligaciones mínimas» como la aprobación del techo de gasto o los Presupuestos. Dicho esto, pidió al PSOE y Ciudadanos que no «bloqueen» su investidura para que haya un gobierno a primeros de agosto. Esta vez Rajoy tiene prisa.

El Rey recibirá hoy en el Palacio de la Zarzuela a la nueva presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, y al del Senado, Pío García-Escudero, quienes le informarán de la constitución de sus respectivas Cámaras para la XII legislatura. Luego corresponde al Borbón decidir cuándo inicia la ronda de consultas, aunque se prevé que no tardará mucho en ello.

Rajoy aspira a tener finalmente un sí de Ciudadanos que fuerce al PSOE a abstenerse. Al ser preguntado ayer si cree que hay agua en la piscina para ir a una investidura y si en caso de no contar con apoyos suficientes no irá a ese debate, Rajoy ha exclamado: «lo importante no es que haya o deje de haberla sino que uno no se caiga».

PSOE y Unidos Podemos dicen que lo ocurrido en las votaciones de ayer hace prever que el PP pueda obtener algún tipo de apoyo de partidos nacionalistas catalanes y vascos, lo que estos niegan abiertamente.GARA