Balaídos acoge los primeros 90 minutos para hacer historia

La escuadra babazorra ha pasado a la siguiente eliminatoria copera en las cinco ocasiones en las que se ha medido al conjunto celtiña.

CELTA-ALAVÉS

A solo tres horas –o puede que un poco más– está el Alavés de hacer historia, alcanzando la primera final copera de su historia. Después de protagonizar cuatro anteriores intentonas, el Glorioso tendrá ante el Celta la ocasión inmejorable de pujar por obtener su primer título oficial y, de paso, poder disputar competición europea el próximo año, caso de ganar el trofeo.

Una situación golosa para el club babazorro e impensable hace solo un año, cuando el equipo caminaba con paso firme en su regreso hacia Primera. Cierto es que el principal objetivo de la temporada es la permanencia, pero la óptima situación clasificatoria y, sobre todo, las buenas sensaciones que desprende la escuadra albiazul invitan a soñar con el dulce.

Impresiones que deberán materializarse en un Balaídos donde hace apenas unas semanas el Alavés caía en Liga en el último suspiro del encuentro, aunque mediatizado dicho marcador por jugar en inferioridad durante toda la segunda parte. Ahora la historia tendrá que ser diferente para que en la fiesta que será la vuelta los anfitriones dispongan de opciones reales. El buen rendimiento foráneo de los alaveses, en todo caso, hace abrigar justificadas esperanzas.

Llegado a este punto de la competición del K.O. ya no hay margen de error ni de probaturas, de ahí que el Alavés vaya a saltar al césped celtiña con el mejor once posible, si bien ahí los locales pueden jugar con ventaja, tras haber reservado a sus futbolistas titulares en la visita a Butarque.

Marcaje especial a Theo

Como ya ocurriese en la eliminatoria de los celtiñas contra el Real Madrid, los de Berizzo tendrán especial cuidado en cubrir las cabalgadas por banda izquierda, con un marcaje especial de Wass –ya lo hizo sobre Marcelo– a Theo, aunque el francés podrá exprimir su velocidad ante un adversario renqueante entre semana y que se ha recuperado a marchas forzadas para estar presente en tan importante cita.

La historia también está del lado vasco y, además, de manera más que contundente. En las cinco ocasiones en las que Alavés y Celta se han medido en Copa, siempre se ha clasificado para la siguente ronda la escuadra albiazul. Todo un cúmulo de condicionantes que no influirán sobre el verde, pero que inducen a ilusionarse.

Pellegrino: «Para pasar tenemos que hacer las cosas a un nivel excelente»

Llegados a este punto, la exigencia es máxima. Y Mauricio Pellegrino lo sabe. «El Celta ha dejado fuera al Real Madrid y al Valencia, así que, para disponer de opciones de pasar, tenemos que hacer las cosas a un nivel excelente», manifestó el entrenador argentino.

Ayudará a ello «la gran ilusión y motivación» que existe en vestuario y entorno, porque «tener la posibilidad de jugar la segunda final en toda su historia es un momento único», calificó.

Pellegrino desveló que en la preparación de los suyos se ha centrado «en los detalles del partido, porque a veces los marcos que envuelven al juego te sacan del encuentro». Admitió, por otro lado, que un gol fuera de casa «tiene un gran valor».

Puestos a analizar al rival, el preparador de Leones indicó que el Celta es un equipo «muy coordinado y muy bien trabajado», a la par que suma «muchas opciones en ataque, en medio campo y en defensa», resaltó el entrenador albiazul. N.M.

El Alavés está invicto en lo que se lleva de Copa

La trayectoria copera del Alavés está siendo inmaculada. Hasta tal punto que los de Mauricio Pellegrino siguen invictos desde que iniciasen la competición en dieciseisavos. Tres victorias y otros tantos empates es el bagaje positivo que han protagonizado los albiazules.

El Barcelona coge ventaja a golazo limpio (1-2)

En la otra semifinal, el Barcelona coge ventaja tras ganar 1-2 al Atlético en el Calderón. Los catalanes se adelantaron con dos golazos, uno de Luis Suárez tras galopada desde el centro del campo y otro de Messi de zurdazo desde fuera del área. El Atlético apretó en la reanudación y Griezmann recortó distancias.