Un plan para revertir la guetización de la escuela

La consejera de Educación de la CAV presentó ayer el “II Plan de Atención al Alumnado Inmigrante” en el que se recogen una serie de medidas –algunas al parecer ya se están aplicando y otras son nuevas– que buscan una escolarización más equilibrada para que la integración sea efectiva. El plan, además, pretende favorecer la escolarización del alumnado de origen inmigrante en modelos euskaldunes, especialmente en el caso de aquellos alumnos que se incorporan en la etapa de Educación Infantil o en el primer ciclo de Primaria.

De la idoneidad del plan presentado dará cuenta su evaluación final. Lo que sí se ha comprobado –y las organizaciones sociales llevan tiempo denunciando– es que la escuela vasca reproduce las desigualdades sociales. Save the Children constató que la diferencia de rendimiento según el origen socioeconómico y cultural era la más alta del Estado y una de las más altas de todos los países de la OCDE. Los datos sobre concentración de alumnos en ciertos centros daban cuenta asimismo de procesos de segregación por origen o situación socioeconómica. Además, estos últimos años la brecha ha aumentado a consecuencia de los recortes presupuestarios que han golpeado directamente a las familias con menores ingresos.

El plan por lo tanto no llega para evitar situaciones no deseadas dentro de la escuela, sino para revertir realidades palpables y extendidas que se han agravado, además, con la crisis y la extensión de la pobreza. Aún siendo necesarios criterios claros y medidas administrativas, posiblemente el plan necesite también apoyo presupuestario que restituya la inversión en aquellas partidas que contribuyen a aumentar las oportunidades de una educación mejor para los hijos e hijas de las familias con menos recursos. La batalla por una escuela que garantice la igualdad de oportunidades a pobres e inmigrantes se dirime, sin duda, en el ámbito de la enseñanza, pero cada vez más, también en el fiscal y presupuestario.