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Donostia 2016 lega 50 proyectos y «empuja» la «nueva imagen» vasca


Medio centenar de proyectos relacionados con la convivencia o la creación compondrán el legado concreto de la Capitalidad Cultural, un proyecto que ha supuesto el «último empujón» a la «nueva imagen» de los vascos, país «interesado en la cultura y que deja de estar marcado por la violencia». Esa es la conclusión a la que ha llegado el consejero de Cultura de Lakua, Bingen Zupiria, quien se expresó en esos términos al glosar el «intangible» de lo que ha supuesto Donostia 2016.

Junto al consejero comparecieron el director general de Donostia2016 Pablo Berástegui, el diputado general de Gipuzkoa Markel Olano, el alcalde de Donostia Eneko Goia y el director general de Instituciones Culturales y del Libro del Ministerio español de Cultura Oscar Sáenz de Santamaría.

Zupiria opinó que Donostia «ha superado el reto de la capitalidad» y consideró que el legado es «una palanca para seguir avanzando» en esos objetivos. «Hoy somos un país en paz que es reconocido por su apuesta por la innovación cultural» y Donostia2016 «ha sido el ultimo empujón en esta nueva imagen de país interesado en la creatividad y en la cultura», opinó.

En la herencia «tangible» figuran proyectos relacionados con la convivencia y los derechos humanos, que serán gestionados por el Centro de Recursos Pedagógicos de Aiete, en colaboración con el Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos y la Secretaría para la Paz de Lakua. Entre ellos figuran “Sin adiós”, “Teatro Fórum”, “Tiras que aflojan” y “Ehunberri”.

Iniciativas

La versión de “El sueño de una noche de verano”, una de las producciones con mejor acogida, también tendrá su continuidad mediante un espectáculo, que «no tiene por qué ser una obra clásica», pero que sí será una producción teatral que se desarrollará en un entorno natural dentro de tres años, señaló Berástegui. También seguirán iniciativas relacionadas con la diversidad, como “Harri zahar”, “Andre berri”, “Kontukontanitz”, “Break a leg”o “Olatu talka”.

La financiación correrá a cargo en algunos casos de las instituciones que la desarrollan, mientras para otras existe un «remanente de un millón de euros», indicó Berástegui. Respecto a la Fundación 2016, dijo que «está en proceso de liquidación», aunque continuará en 2018 sin actividad, «para justificar las ayudas europeas».