08 JUIL. 2017 GUTUNAK Instalaciones culturales IñAKI ALBISU Donostia Parece que de nuevo estamos ante uno de esos «sucesos» que dejan, por lo menos «perpleja», a la ciudadanía. Digamos, que el centro de Donostia cuenta con dos instalaciones culturales importantes, el Koldo Mitxelena y la Biblioteca Municipal en los bajos del ayuntamiento. La primera, una instalación que podríamos considerar casi «exquisita», algo pequeña (pero este es un defecto generalizado en nuestro territorio) y la otra que casi me atrevo a calificar de «semisótano infecto». Pues bien la noticia parece ser que el Koldo Mitxelena quedara reservado a 4 «investigadores» y 4 «incunables» y para el «pueblo» será suficiente «el infecto semisótano». Es imposible que esto no cause perplejidad y osadía en la ciudadanía, cuando además se desconocen las razones. ¿Nadie pensará que es para mejorar la atención al ciudadano, no? Si es que no hay dinero ¿por qué no se dice? Pero es que, además, llueve sobre mojado; hace no mucho hubo otro episodio «similar». Se desmontó Arteleku, instalación cultural puntera en muchos aspectos, (¿qué no se podía ordenar en Txominenea con Arteleku?), con una enorme mentira, de un centro en Santa Teresa que no duro ni unos meses. Pues esta es la situación de nuevo; perplejidad y recelo es poco decir, evidentemente.