Urrutikoetxea y Larunbe sanan heridas en Bastida

La pareja vizcaina se hizo con el torneo de la Rioja Alavesa en un gran partido del delantero de Zaratamo ante Irribarria y Merino II, olvidándose de paso de las decepciones del campeonato de la capital arabarra.

URRUTIK.-LARUNBE 22

IRRIBARRIA-MERINO 14

Jugando por separado, el torneo de La Blanca en Gasteiz había dejado algunas heridas abiertas en Mikel Urrutikoetxea, al que se le escapó una final que tenía en la mano en el último suspiro, y en Mikel Larunbe, que no pudo dar su nivel en la semifinal, pero ambos encontraron unos kilómetros más al sur, en Bastida, el lugar en el que cerrar las llagas, haciéndose con la final del torneo de Arabar Errioxa.

Con los lógicos altibajos estivales, más acusados en el zaguero, la de ayer fue una victoria convincente por parte de la pareja de Asegarce, en el que cad uno de los pelotaris se impuso a su par en su parcela.

Con un Urrutikoetxea muy enchufado, ejecutando remates desde todas las posturas, los vizcainos tuvieron un arranque espectacular, que les permitió meter tierra de por medio. Larunbe también enseñaba la espalda a un David Merino con poca chispa y los de Aspe solo eran capaces de sumar tantos a base de dos pelotas enviadas al colchón de arriba por el de Galdakao y otro error de Urrutikoetxea (9-3). El gesto de Irribarria, con muy pocas opciones, cuando pudo ejecutar su primer gancho fue significativo en el tanto siguiente y supuso un punto de inflexión en el partido.

Reacción sin premio

Las pelotas perdieron brillo, el propio delantero de Arama tuvo más opciones de cambiar el ritmo de sotamano y el trabajo se le fue acumulando a un Larunbe que por momentos ofreció dudas con su derecha y, poco a poco, los de Aspe se fueron acercando en el marcador.

Sin embargo, una inoportuna falta de saque en el 12-10 y un buen tanto de Larunbe con 15-14, el momento más crítico de los colorados, frustró esa remontada y Urrutikoetxea se encargó después de que esta final no se les escapara.