¡Vamos carajo, Luis, vamos «Profe»!

Si no paras, te vas al descenso», le avisó con este símil futbolístico el médico del Athletic, acabado su ciclo de dos arrebatadores años en Bilbo. Y se tomó el consejo en serio: «Frené la máquina para reinventarme». El propio Marcelo Bielsa, tras 21 años de camaradería, le dijo aquello de «Luis, ya somos dos elefantes viejos que estamos chocando nuestras cabezas». Se separaron, pero nunca se alejaron. Cinco años después, Luis María Bonini, el ‘Profe’, ha dejado de dar lecciones en vida. Un cáncer gástrico ha podido con su entereza a los 67 años. Justo en el día en el que el multimillonario PSG de los petrodólares no tenía piedad de un histórico Celtic de Glasgow. Brendan Rodgers, técnico de los católicos, avisó en la previa del duelo: «El Celtic tiene una historia y una afición que no se puede comprar, pero nunca podremos competir con el PSG en términos financieros».

Podrán golearnos, podrán ganarnos, tener a los mejores, pero la pasión y la forma de entender este deporte no se compra con dinero. Luis Bonini representaba a estos últimos. Y por eso decía tener ganas de llorar cada vez que oía hablar de Bilbo. «Allí sí que juegan por un sentimiento», recordaba. Desde hoy, tendrá su pequeña baldosa en el Botxo. ¡Vamos carajo, Luis y la concha de tu hermana, vamos ‘Profe’, carajo!